El escultor Javier Alonso Márquez delante de una de sus obras de la colección "Estilitas y horizontes" que se exhibe en la galería Cristina Marín de Zaragoza | Europa Press - EUROPA PRESS

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La muestra «Estilitas y horizontes» del escultor zaragozano, Javier Alonso Márquez, se exhibe en la galería Cristina Marín, ubicada en la calle Manuel Sancho 11, en el Casco Histórico de la capital aragonesa.

Las 22 piezas de esta exposición son los últimos trabajos de este artista, que se pueden contemplar y también comprar en esta céntrica galería de arte. La muestra estará abierta al público hasta el 2 de noviembre, de martes a viernes, en horario de 18.00 a 20.30 horas; y los sábados de 11.00 a 13.30 horas.

En esta nueva propuesta, el autor ha optado por crear su obras envueltas en paisaje, frente a sus habituales esculturas más solitarias, en las que sus personajes aparecen rodeados de más elementos de la naturaleza.

Además, el color que aporta al conjunto de la escultura le confiere más profundidad a las obras, algunas de gran formato y otras formando pequeños cuadros en las que los personajes parecen querer salir.

Imán

La técnica empleada es mixta, ha explicado Alonso Márquez en declaraciones a Europa Press, para revelar que una de las curiosidades de alguna de las obras son los imanes colocados detrás del soporte que permite «desplazar» al personaje por el cuadro.

Esta movilidad de la escultura es posible gracias al latón sobre el que descansan las figuras, que están esculpidas en bronce, material que no es atraído por los imanes.

Otro elemento que puede llamar la atención del espectador son las pequeñas ramas que simulan ser árboles y que son realmente trocitos de ramas sin corteza para su posterior tratamiento con resinas que le aporta esa «verdadera autenticidad», ha añadido.

Tras su paso por Zaragoza, la muestra «Estilitas y horizontes» está previsto que viaje a Barcelona.

Javier Alonso es un habitual de la sala Cristina Marín, donde ha llevado sus esculturas en otras ediciones como la muestra «Las Moradas» de 2019 o «El hombre en su laberinto», que se pudo ver en 2016 o «Náufragos» en 2014 y un año después en la galería Beaskoa de Barcelona.

La obra de este escultor también se ha exhibido en otras salas de Zaragoza como Universidad San Jorge, Centro Joaquín Roncal, el Museo Orús de Utebo, el Torreón Fortea o la salas de exposición de Bantierra de Zaragoza, Huesca y Calatayud.