Imagen de la junta de la Procampo, celebrada en Palma. | Teresa Ayuga

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El futuro del Estadi Balear vivió este jueves una jornada decisiva. Fuera de uso desde hace meses y víctima del deterioro, el recinto de la Vía de Cintura busca una solución a una problemática que lleva demasiado tiempo a la espera de una salida. Para intentar desbloquearla, la Procampo, que reúne a los copropietarios de la instalación, llevó a cabo una junta general que marca un punto de inflexión en el proceso.

Los primeros pasos fueron la constitución de una nueva junta directiva y unos estatutos que permitirán a la asociación maniobrar con mayor comodidad de cara a sus futuras actuaciones. Ambos puntos recibieron el apoyo del poco más de medio centenar de títulos representados en el encuentro, celebrado en el Colegio de Aparejadores y Arquitectos de Mallorca. Pese a ser una cifra baja, los nuevos gestores de la Procampo trabajarán para reunir el mayor número de títulos localizables con el objetivo de unir fuerzas y dar una salida a la vetusta instalación de Ciutat.

La nueva junta directiva será presidida por Damià Estelrich, que da un paso al frente tras estar al mando de la gestora. A su lado tendrá a dos vicepresidentes, Jeroni Petro y Toni Rigo; Toni Vidal, ejerciendo de secretario, con Toni Salas como tesorero, y un grupo de vocales que integran la nueva estructura.

Igualmente, se dio luz verde a unos renovados estatutos, con los que mejorar su capacidad de maniobra ante este proceso, que tiene como finalidad dar una solución a un escenario emblemático de Ciutat que sigue precintado a la espera de conocer su porvenir.

Una de las primeras metas que se ha fijado el equipo gestor de la Procampo será la de abrir una vía de contactos con las partes implicadas en el futuro del Estadi Balear. En primer lugar, cabe conocer las intenciones del club, de un Atlètic Balears con cuya cúpula se espera mantener un encuentro en vistas a saber si en sus planes entra regresar al campo de la Vía de Cintura, tras haberse instalado en Son Malferit tras el cierre del Estadi. En caso contrario, el enfoque de la situación variaría de forma clara.

Igualmente, se quiere mantener una reunión con el nuevo equipo de gobierno del Ajuntament de Palma, con la intención de conocer su postura en torno al Estadi Balear y las vías de solución al problema que plantea.

El fin de la nueva directiva de la Procampo no es otro que intentar confeccionar un proyecto para devolver a la vida al Estadi Balear, apoyándose en el recinto actual, aunque conscientes de que se tendría que construir un recinto prácticamente nuevo, dado el deterioro en el presente.