Imagen de la afición del Atlètic Balears el pasado domingo. La hinchada blanquiazul llenó el estadio blanquiazul

TW
24

«No podemos hacer nada más, hay que estar contentos porque hemos estado en el sorteo y esto demuestra que estamos vivos».

Otro hueso duro de roer. El Atlètic Balears se las verá con el Lugo en la próxima ronda de la fase de ascenso a Segunda División B. Tras la decepción que supuso caer ante el Mirandés, el conjunto de Gustavo Siviero debe volver a levantarse para medirse a un rival muy difícil, clásico del fútbol gallego, que ya trató de subir a Segunda A la pasada temporada sin conseguirlo, y que como el conjunto palmesano ha puesto toda su ilusión en esta fase de ascenso para tratar de conseguir el objetivo. El primer encuentro se disputará el próximo domingo a las 12 del mediodía en el campo 'Anxo Carro' con capacidad para casi 5.000 espectadores y la eliminatoria se decidirá en el choque de vuelta el 10 de este mes de junio. Los otros emparejamientos serán Albacete-Cádiz; Lucena-Ponferradina y Linares-Tenerife. No era el Lugo el equipo preferido por el Atlètic, pero puestos a elegir, ya no existe un rival ni pequeño ni tampoco más asequible que otro en este tipo de eliminatorias.

A nivel de número, el conjunto lucense ha finalizado el campeonato regular en tercera posición con 64 puntos, superado sólo por el Real Madrid (78) y el Tenerife, que finalizó segundo con 64. El equipo está dirigido por un viejo conocido de la afición española, Quique Setién y ha firmado una temporada espectacular cosechando sólo 6 derrotas y anotando 55 goles. En esta fase de ascenso ha conseguido ya deshacerse un un equipo también complicado como el Eibar, al que venció uno a cero en la ida y empató el pasado domingo a cero en Ipurúa.

Zarandona, hermano del exjugador del Betis, Bemjamín, es el futbolista que más pueden recordar los aficionados isleños, pero por lo demás, el equipo está confeccionado por futbolistas de claro perfil de Segunda División B con predominio de la fuerza, el carácter y la lucha. No es el Mirandés, ni su juego tan vertical, pero nadie miente cuando asegura que se trata de un rival de considerable potencial y será necesaria una lucha feroz, una gran dosis de fortuna y el apoyo de la afición para poder acceder a la próxima eliminatoria y mantener vivo el sueño del ascenso. Lugo es la próxima estación.

«Han perdido seis partidos en todo el año y en un grupo como el del Castilla. No tenemos miedo a nadie, demostramos que damos la cara y podemos pasar».

«El Lugo no nos quería a nosotros y nosotros tal vez tampoco a ellos. Creo que aprendimos de esta pasada eliminatoria que es clave marcar fuera».

«Tiene buen manejo del balón. Crean peligro con sus armas ofensivas y más allá de los futbolistas, es importante mantener el espíritu de la anterior ronda».