Varios de los jugadores del Mallorca que disputaron la final de la Recpoda de Europa, junto a Héctor Cúper (d). | Jaume Morey

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Una explosión de mallorquinismo ha salpicado este domingo todos los rincones del Teatre Principal para repasar un siglo de vida y recordar que la fiesta del Centenario ha comenzado. Porque más allá de números y clasificaciones, el club, su afición y su entorno están de enhorabuena.

Presentada por Jaume Colombàs y Elisabeth Moll, la ceremonia que da por iniciados los fastos ha supuesto un recorrido a bordo de esa montaña rusa sobre la que ha viajado el conjunto rojinegro durante su ajetreada existencia que arrancó, como no, a principios de 1916 y en Bons Aires. La aventura iniciada por Adolfo Vázquez Humasqué, fundador del Alfonso XIII, cobró dimensión a través de los testimonios de dos de sus familiares, Rafael y Jimena Vázquez.

El presidente Utz Claassen ha abierto la tanda de los discursos, en la antesala de la presentación oficial de la camiseta diseñada especialmente para el Centenario que el equipo lucirá ante el Oviedo.

La gala ha continuado con la aportación de Toni Tugores, presidente de la comisión del Centenario y con las imágenes del primer ascenso. Otra etapa gloriosa que se ha recordado, la de la primera final de Copa del Rey, en Madrid, en 1991, ha estado ilustrada con el emocionado discurso de Miquel Contestí.

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Emoción

Uno de los momentos cumbre ha llegado al echarle una ojeada a lo que ocurrió a finales de los noventa, con las finales de Mestalla y Villa Park y las intervenciones del expresidente Bartolomé Beltrán y del entrenador más admirado por la afición del Mallorca: Héctor Raúl Cúper. Y de Copa a Copa, la gala se ha trasladado a 2003 y a la hierba del Martínez Valero de la mano de Mateu Alemany.

A partir de ahí, el mallorquinismo ha viajado de vuelta al presente para disfrutar del primer sorbo de la película del Centenario que dirige Marcos Cabotà y para escuchar al actual consejero delegado, Maheta Molango.

Los capitanes del Mallorca en sus momentos más brillantes, Olaizola, Chichi Soler y Nadal, pusieron el broche momentos antes del discurso de la presidenta del Govern balear, Francina Armengol.

Por supuesto, la gala acabó con la interpretación del himno Junts, tu i jo por parte de La Musicalité.