Dani Rodríguez celebra uno de los dos goles que anotó frente al Villarreal.

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La permanencia estará cara esta temporada, incluso por encima de los 42 puntos, de ahí que perder dos encuentros seguidos suponga que puedan aparecer los fantasmas del pasado. Sin embargo, esta temporada el equipo bermellón tiene algo de lo que ha carecido estas últimas campañas en la máxima categoría y es un colchón de puntos que le permite poder tropezar de vez en cuando siempre que se levante con rapidez. En estos momentos el Mallorca está seis puntos por encima del descenso, una distancia importante, pero no definitiva ni tampoco considerable.

Hay que seguir dando pasos hacia adelante y ahora es un momento importante de la temporada. El equipo de Aguirre ha perdido la bala de ganar dos partidos consecutivos en casa tras caer contra el Elche y este domingo, frente a la Real, hay que volver a empezar de nuevo, recuperar sensaciones y dar un paso adelante otra vez en todos los sentidos. El conjunto vasco vendrá de jugar en Europa este jueves noche y con apenas dos días de descanso de por medio ya que el choque se disputa en Son Moix el domingo a las dos. Eso tiene que aprovecharlo el Mallorca, como también tiene que tomar nota de los errores cometidos frente al Elche más allá de la decisión polémica del VAR.

Uno de los principales motivos que invitan al optimismo está en las estadísticas y es que el Mallorca, desde la llegada de Javier Aguirre y Toni Amor no ha encadenado tres derrotas consecutivas. Ni el curso pasado ni tampoco el actual. Es cierto que ha habido momentos más bajos como por ejemplo las jornadas siete, ocho, nueve y diez cuando perdió contra el Barcelona, posteriormente empató en el Martínez Valero y posteriormente dejó de sumar puntos frente a Sevilla y Real Sociedad. Sin embargo, siempre hubo ese pequeño oasis del punto sumado en el campo del colista, un pobre botín pero que permitió al menos no encadenar tres derrotas consecutivas.

Porque no sumar ningún punto de nueve sí que es doloroso y hace que el colchón con el descenso pueda descender de forma considerable. No obstante también tienen que fallar muchos equipos y esto siempre juega a tu favor. Deportivamente el equipo bermellón se enfrentará ante una Real al alza y que tiene la enorme motivación de clasificarse para la disputa de la próxima Liga de Campeones. Entre sus jugadores Take Kubo, uno de los futbolistas llamados a marcar diferencias en el fútbol español y cuyas mejores prestaciones fueron vistiendo la camiseta del conjunto bermellón.

Ante el Elche el once de Aguirre exhibió vías de agua preocupantes, sobre todo en el segundo tiempo. El rival, más necesitado y presionado, fue ganando terreno, acechando por momentos la meta de Rajkovic, que fue el mejor del partido, y marcando un gol que le valió los tres puntos. La desconexión en muchos minutos resultó evidente y el equipo se movió a impulsos, sin esa continuidad de la que suele hacer gala y sobre todo faltó el acierto que pide Aguirre. Tras encadenar cinco triunfos seguidos en casa, el reto es precisamente ese, volver a tomar una racha que permita no solo aumentar la distancia con el vagón de cola, también afianzar al grupo en la zona templada y evitar sobresaltos de última hora en una temporada donde la salvación está muy cara.

El apunte

Muriqi, baja por sanción y Valjent, duda

Vedat Muriqi ha sido suspendido un partido por el Comité de Competición por acumulación de amonestaciones, mientras que el ayudante de Aguirre, Toni Amor, ha sido sancionado dos partidos por actitudes de menosprecio o desconsideración hacia los árbitros o autoridades deportivas. En el apartado deportivo, Martin Valjent es duda con vistas al choque ante la Real aquejado de molestias en la zona lumbar.