Imagen de la salida de los jugadores del Real Mallorca al césped de Son Moix antes de iniciarse el partido ante el Barcelona disputado este martes en Son Moix. | Pilar Pellicer

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La visita a Vallecas de este sábado (16:15) del Real Mallorca plantea un dilema para Javier Aguirre, que tiene que decidir entre dar continuidad al bloque del pasado curso que cumplió con nota ante el Fútbol Club Barcelona o devolver al once al grueso de fichajes realizados este verano.

El empate ante el Barça dejó sensaciones positivas al margen del punto conseguido. Los bermellones recuperaron la identidad sobre las que construyeron su notable ejercicio 2022-23 con un equipo titular con diez jugadores que ya estaban en la plantilla y sólo Samú Costa fue de la partida en el centro del campo. El grueso de incorporaciones vieron el inicio del duelo desde el banquillo, donde Aguirre tendrá que elegir entre su particular guardia pretoriana o asentar en su sistema inversiones importantes como las de Sergi Darder o Larin.

La revolución del técnico mexicano respecto al equipo que cayó con estrépito en Girona llegó también motivada por la necesidad de rotar en una jornada intersemanal, aunque también dejó más lecturas. Y es que los cambios no sólo propiciaron el reparto de minutos y de esfuerzo sino que también sirvió para que jugadores como Abdón Prats, Gio González o Antonio Sánchez se reivindicaran con una puesta en escena solvente y los teóricos hombres importantes del plantel sintieran la competencia.

El plan de partido para hacer frente al Rayo y a una visita a un campo peculiar como Vallecas puede variar respecto al del martes, pero hay códigos del fútbol que pueden alimentar la idea de insistir con varios nombres propios. Si lo que funciona no se toca hay futbolistas como Antonio Sánchez o Abdón Prats que se han ganado tener más peso en las alineaciones. Mención especial merece el delantero artanenc, que ha visto portería en los últimos partidos y también es habitual que se premie el acierto de los jugadores en racha.

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Las últimas sesiones antes de viajar a Madrid también determinarán las opciones de Gio González de repetir en el once, ya que el uruguayo se marchó renqueante del duelo ante el Barça. Aguirre lo necesita teniendo en cuenta la lesión de Pablo Maffeo, que estará alrededor de un mes de baja, y la baja de otro lateral como Toni Lato. Con Jaume Costa como inquilino del carril zurdo, en la derecha todo está pendiente del charrúa.

Si el momento goleador de Abdón Prats parece cerrarle las puertas de la titularidad a Cyle Larin, otro canterano como Antonio Sánchez se ha presentado como una seria alternativa a Manu Morlanes y Sergi Darder. El desgaste físico del último encuentro juega en contra del canterano, que todo apunta que sería el damnificado en beneficio de Darder, cuya aclimatación al engranaje de Javier Aguirre aún está en proceso.

Encontrar el contexto ideal para que el artanenc luzca su nivel y haga jugar al equipo es una asignatura pendiente que puede conllevar cierto tiempo, pero la competición no espera a nadie y la visita a Vallecas puede ser un escenario en el que el mallorquín dé el golpe en la mesa. Al margen de su calidad y su visión, su disparo y su capacidad para ejecutar el balón parado no los tiene ningún otro jugador del equipo.

En cualquier caso, el dilema a la hora de elegir también supone una buena noticia para Javier Aguirre, que sabe que tiene ‘enchufados’ a los menos habituales y a los teóricos titulares con la necesidad de dar algo más ante el Rayo si les toca actuar.