Vicenç Vidal, conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Pesca, en el Parlament. | M. À. Cañellas

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El conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Pesca, Vicenç Vidal, ha defendido este martes que la eliminación de las cabras de Es Vedrà (Ibiza) «no se trata de una matanza sino de una gestión de conservación», como parte de «una decisión difícil pero necesaria».

Vidal ha respondido en el pleno del Parlament sobre este tema, por el que ha sido cuestionado por el diputado del PP Vicent Serra, y por el de Podemos Baltasar Picornell, y que ha levantado una gran polémica.

Serra ha criticado la «doble postura» del Govern, que por una parte ha decidido eliminar las cabras de Es Vedrà mediante «una matanza de seis horas con escopeta», mientras presenta una iniciativa que defiende el bienestar de animales domésticos y salvajes.

«No se trata de una matanza, se trata de una medida de gestión de conservación», ha afirmado el conseller, que ha insistido en que la actuación se ha tomado con el soporte y consenso de los distintos sectores involucrados, como el Gen-Gob, forestales y científicos, entre otros.

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«Ustedes solo quieren hacer demagogia barata», le ha contestado el conseller, que ha añadido que la prioridad ha sido la conservación de una área protegida, que se ha hecho legalmente, y ha cuestionado al PP por este cuestionamiento cuando eliminó también cabras durante su gobierno.

«Este conseller se preocupa por el bienestar animal, ustedes las habrían dejado morir de hambre y sed (...) Hemos hecho una actuación desagradable, sí, necesaria sí», ha asegurado Vidal.

Por su parte, Picornell ha preguntado si la matanza de las cabras con escopeta era el método más adecuada, y ha pedido más sensibilidad al Govern para llevar a cabo estas actuaciones, que han enfrentado a los colectivos animalistas y ecologistas y «puede ser una demostración de que las cosas no se han hecho bien».

«Desgraciadamente sí, es el método adecuado», ha señalado el conseller, que ha incidido en que se han estudiado todas las alternativas posibles, y que la ha llevada a cabo no ha sido «una acción improvisada», ya que ha sido «una decisión difícil, pero tomada en consciencia».

«Lo hacemos porque gestionamos y tenemos responsabilidad», ha recalcado Vidal, que ha precisado que la medida ha sido tomado priorizando la conservación, la seguridad del personal técnico y par que «las cabras tengan una muerte digna».