El Índice de Precios de Consumo (IPC) ha subido un 0,7% en Andalucía durante abril con respecto al mes anterior, mientras que en términos anuales la comunidad también registra un incremento, lo que implica que este abril los precios hayan crecido al 4,6% si se compara con el mismo mes del año anterior.
En esta subida los alimentos han moderado su crecimiento, situándose en un 13,2% en términos anuales, 4,2 puntos menos que en marzo, según ha informado este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con este incremento, la inflación acumulada se sitúa en la comunidad andaluza en el 1,9% en el cuarto mes del año.
En términos interanuales, la tasa del 4,6% andaluza es superior a la nacional, que se sitúa en el 4,1%, y solo inferior a la de Melilla (5,8%) y Canarias (5,5%), mientras que Baleares y la Región de Murcia presentan igual tasa que Andalucía en abril. Por debajo de la tasa andaluza se sitúan el resto de comunidades autónomas.
Por sectores y comparando este abril con el de 2022, en Andalucía los precios han subido sobre todo en alimentos y bebidas no alcohólicas (13,2%), bebidas alcohólicas y tabaco (8,8%), restaurantes y hoteles (8,4%), , menaje (6,8%), otros bienes y servicios (5,2%) y ocio y cultura (3,3%).
Le siguen enseñanza (2,9%), comunicaciones y medicina (2,5%, respectivamente), vestido y calzado (2,1%), y, por último, transporte (1,4%). Por contra, baja un 12,4% la vivienda.
La inflación en andalucía por provincias
Por provincias, donde más se han incrementado los precios en el último año ha sido Cádiz (5,2%, con un subida mensual del 0,7% respecto a marzo), seguida de Málaga (5%, con una subida mensual del 0,7%), Huelva (4,8%, con una subida mensual del 0,8%) y Granada (4,6%, con un 0,8% más respecto a marzo).
A continuación se sitúan Sevilla (4,5%, con una subida del 0,5% respecto a marzo), Almería y Jaén (4,4% respectivamente, y una subida del 0,8% mensual en el caso de la primera, y del 0,7% en el caso de la segunda), y, por último, Córdoba (3,8%, y una subida del 0,9% respecto a marzo).
Datos nacionales
A nivel nacional, el IPC subió un 0,6% en abril en relación al mes anterior y elevó ocho décimas su tasa interanual, hasta el 4,1%, por el encarecimiento de los carburantes y una disminución menos intensa de los precios de la electricidad.
El Mininisterio de Asuntos Económicos ha atribuido el repunte del IPC al «efecto base» que supone comparar la inflación de abril de este año con los primeros meses del estallido de la guerra en Ucrania. Pese a la subida de ocho décimas, el Departamento que dirige Nadia Calviño ha subrayado que el dato de abril «es menos de la mitad» del registrado un año antes.
Por su parte, la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) bajó nueve décimas en abril, hasta el 6,6%, situándose 2,5 puntos por encima del IPC general.
El Ministerio de Asuntos Económicos ha achacado el descenso de la inflación subyacente a la «fuerte ralentización» del precio de los alimentos, que registraron «la mayor caída de la serie histórica» en un mes. En concreto, según el INE, los precios de los alimentos crecieron en abril un 12,9% en tasa interanual, más de 3,5 puntos por debajo de la tasa de marzo.
En este comportamiento influyó el abaratamiento de legumbres y hortalizas y el hecho de que los precios de la carne, el pan y cereales, los aceites y grasas, y leche, queso y huevos aumentaron menos en abril de este año que en el mismo mes de 2022.
El Departamento que dirige Nadia Calviño ha subrayado que España se mantiene entre los países con menor inflación de la Unión Europea y ha defendido que las medidas adoptadas el pasado mes de diciembre «seguirán contribuyendo a amortiguar la evolución de la inflación».
En términos mensuales (abril sobre marzo), el IPC registró un aumento del 0,6%, dos décimas más de lo que subió en marzo (+0,4%) y ocho décimas por encima del dato de abril de 2022, cuando los precios bajaron un 0,2%.
En este incremento mensual de los precios influyeron varios factores, entre ellos el encarecimiento del vestido y el calzado por la nueva temporada primavera-verano; la subida de los precios de los carburantes para vehículos personales, y el mayor coste de los paquetes turísticos y de los servicios de alojamiento y la restauración. Por contra, los precios del gas y la electricidad bajaron un 8,9% y un 3,3% en el mes respectivamente.
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