Los detenidos son dos matrimonios extranjeros que regentaban establecimientos en Barberà del Vallès, Castellar del Vallès y Polinyà (Barcelona), ha informado la policía en un comunicado.
Así, «se aprovechaban de la situación de necesidad y vulnerabilidad» de las víctimas, todas ellas también de nacionalidad extranjera, y diez de las cuales estaban en España en situación irregular.
Supuestamente les obligaban a «trabajar sin descanso», sin contraprestación económica, sin contrato de trabajo y sin estar dados de alta a la Seguridad Social.
Vivían en los mismos locales en «condiciones higiénico-sanitarias nulas», sin ventilación y en un entorno deteriorado y en el que había material peligroso.
La policía empezó la investigación en abril, y a los detenidos les atribuyen los presuntos delitos Contra el Derecho de los Trabajadores, Contra el Derecho de los ciudadanos extranjeros y Defraudación de fluido eléctrico.
Han quedado en libertad con cargos tras pasar a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Sabadell (Barcelona).
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