La empresa Avanza y el comité de empresa han llegado a un acuerdo este jueves en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA) para desconvocar los paros y las movilizaciones en el servicio de autobús urbano de Zaragoza.
Las partes han acordado que los delegados de prevención probarán el modelo de cámara que ya está instalado en un autobús eléctrico para un primer análisis y, de ser satisfactorio, la empresa dotará a otros seis vehículos --tres cortos y tres largos-- para continuar trabajando y tomar una decisión sobre la idoneidad de este dispositivo para resolver los problemas de visibilidad que denunciaban los conductores, ha informado el sindicato SATTRA, que preside el comité de empresa.
El acuerdo recoge que, en el caso de que se prueba que esta cámara sirve de solución, se tratará de implantar en los 68 autobuses eléctricos «a la mayor brevedad posible». Después de su implantación se realizará la evaluación de riesgos del puesto de trabajo en el modelo de autobús eléctrico analizando todos los elementos, han informado.
Asimismo, han acordado que, en un máximo de cuatro meses, las cámaras estarán colocadas en el resto de los 68 autobuses eléctricos. Además, según SATTRA, la empresa se compromete a reparar las medidas de seguridad averiadas que notifique el conductor.
«Después de esta larga jornada en el SAMA hemos podido llegar al acuerdo de probar la cámara y, si es satisfactoria, instalarla en el resto de buses, buscando que los conductores puedan trabajar con la mayor seguridad posible», han concluido.
Satisfacción en el comité de empresa
El presidente del comité de empresa, José Manuel Montañés, en declaraciones a Europa Press, se ha mostrado satisfecho y ha destacado que, aunque no hayan cumplido todos los objetivos, Avanza se ha comprometido a mejorar la visibilidad de «ángulos muertos» en los autobuses urbanos.
En cuanto a la cámara, que han visto pero todavía no han revisado los delegados de prevención, estará instalada de momento en el autobús autónomo 'Digizity' y comenzará a probarse el 8 de enero. El objetivo es que el resultado del testeo esté listo «lo antes posible».
Estos autobuses se entregarán a los conductores de las líneas donde se asignen, para que puedan probar su eficacia durante siete días, durante el mes de marzo de 2024. El acuerdo no se someterá a referéndum entre la plantilla, con lo que la huelga y las movilizaciones quedan inmediatamente desconvocadas.
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