Archivo - El termómetro de una parada de autobús marca 42 º C | Alberto Ortega - Europa Press - Archivo

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La Comunidad de Madrid registró 10.899 muertes por todas las causas durante el verano de 2023, el tercero más cálido de la serie histórica, lo que supone un 8,1% menos de fallecimientos de los esperados pese a las cuatro olas de calor que se registraron, con un total de 24 días en esa situación.

En concreto, la mortalidad observada en la Comunidad de Madrid por todas las causas y edades entre el 1 de junio y el 15 de septiembre de 2023 supone una media de 102 muertes diarias, frente a la media diaria de 124 registrada en el mismo periodo del año previo, es decir, 22 menos cada día, según datos de los Registros Civiles informatizados (Sistema MoMo) y la morbilidad a partir de las urgencias atendidas en el hospital General Universitario Gregorio Marañón.

Este balance de 10.899 muertes en estos 107 días supone una mortalidad un 8,1% menor a los 11.859 fallecimientos esperados según la mortalidad en los cinco años previos al inicio de la pandemia de Covid-19 (-960), según concluye el informe 'Efectos sobre la salud de las temperaturas extremas: Vigilancia de los efectos del calor 2023', consultado por Europa Press.

En 2022 fueron 13.290 decesos frente a un total de 11.859 esperados, con una mortalidad un 12,1% superior a la esperada, según el estudio publicado por la Consejería de Sanidad en el 'Boletín Epidemiológico de la Comunidad de Madrid'.

En el periodo analizado, únicamente un día, el 26 de agosto, coincidiendo con la última ola de calor de verano, se superó el límite superior esperado de muertes, aunque en términos generales no se aprecian incrementos relacionados con las olas previas en la mortalidad total.

En concreto, ese día se contabilizaron 135 fallecimientos, dos más frente a 133 como valor máximo esperado. De hecho, del día 20 al 25 de agosto hubo un episodio de calor extremo, en el que tanto las temperaturas máximas como las mínimas fueron muy elevadas (con una máxima de 42 grados centígrados el 21 de agosto en Alcalá de Henares). Las temperaturas umbrales de alerta para el estudio son las superiores a 36,5 y 38,5 grados centígrados.

Plan de actuación ante episodios de altas temperaturas

La Comunidad de Madrid elaboró en 2023 el Plan de Actuación ante Episodios de Altas Temperaturas con el objetivo de establecer un sistema de vigilancia y atención temprana y recoger todas las actuaciones que conforman los Planes Específicos de Intervención de las distintas áreas de gobierno regional para actuar de una forma rápida, eficaz y coordinada ante las situaciones de riesgo provocadas por las temperaturas elevadas.

Según el balance de la Aemet entre el 1 de junio y el 31 de agosto, el verano tuvo un carácter muy cálido, con una temperatura media de 24,4 grados centígrados, es decir 1,4 grados centígrados por encima de la media de esta estación (periodo de referencia 1991-2020). En concreto, fue el tercer verano más cálido de la serie de datos que comienza en 1961, por detrás de 2022 y de 2015.

En este sentido, el informe concluye que, a pesar de las altas temperaturas registradas y las numerosas olas de calor, en el verano de 2023 se observó un menor impacto en la mortalidad que en el año previo. «Ello podría estar en relación con la configuración de las olas: más tardías, más cortas, y un menor número total de días con temperaturas de alerta» o la posibilidad de «una progresiva adaptación de la población cada vez mejor informada», se explica en el informe elaborado por la Subdirección General de Vigilancia en Salud Pública, que no aprecia asociación positiva de la mortalidad total con las temperaturas elevadas.

En cuanto a los episodios atendidos en urgencias --con datos del Hospital Gregorio Marañón--, el informe no aprecia un incremento de las mismas relacionado con el aumento de la temperatura máxima o mínima diarias, ni para el conjunto ni para los grupos poblacionales más influenciables, mayores de 74 años y niños de 0 a 4 años.

En total, se registraron 37 casos de «golpe de calor» en el diagnóstico de la urgencia o clínica en la que se menciona relacionada con las altas temperaturas, la mayoría de los cuales (59,5%) correspondían a hombres de 45 a 65 años aunque sin diferencias significativas por sexo según edad. De total, uno falleció y otros cinco tuvieron que ser ingresados.

El informe de Salud Pública destaca además que en las primeras dos semanas de mayo, fuera de la temporada de vigilancia, se identificaron cuatro pacientes con motivo de la urgencia relacionado con las altas temperaturas, todos varones.