El Ayuntamiento de Zaragoza empezará a instalar un total de 126 ventanas motorizadas en el Mercado Central a finales de este año 2023 para «evitar un despilfarro energético» del edificio.
Así lo ha anunciado en rueda de prensa la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, este miércoles, 7 de febrero, junto al consejero municipal de Urbanismo, Infraestructuras, Energía y Vivienda, Víctor Serrano, y el consejero municipal de Economía, Transformación Digital y Transparencia, Carlos Gimeno, en el Mercado Central .
Chueca ha indicado que este viernes el Gobierno de la Ciudad dará el visto bueno al periodo de información pública durante 15 días para después sacar a concurso la ejecución y poder comenzar las obras de climatización del Mercado Central a finales de 2024.
«Es muy importante evitar un despilfarro energético. Con este acristalamiento vamos a conseguir que en verano se mantenga una temperatura más estable y que haya menos calor. Lo mismo en invierno, estabilizando entre 7 y 8 grados la temperatura», ha aseverado.
La alcaldesa ha concretado que el presupuesto municipal de este ejercicio contempla una cuantía de 450.000 euros, del total de 1.099.072 euros que costará la obra completa, que se terminará de ejecutar en los primeros meses de 2025.
«Si finalmente pudiésemos ser más ágiles y pudiésemos llevar todo el cerramiento al año 2024, buscaríamos la solución económica para poder hacerlo a través de alguna modificación a lo largo del ejercicio», ha puntualizado.
Demanda de la asociación de detallistas
En este sentido, ha señalado que el autor de este proyecto es el arquitecto Sergio Sebastián y que las obras constan de la colocación de los ventanales en la parte superior del Mercado Central para solucionar «la carencia más reclamada» por la Asociación de Detallistas de esta instalación municipal.
En concreto, ha apuntado que la actuación refleja la colocación en el llamado Claristorio --en referencia a la parte superior del Mercado-- de un sistema de climatización basado en 126 ventanas motorizadas, 63 en cada lado, que se abrirán de forma automática según las necesidades en los 252 metros lineales que van a ocupar.
«Los ventanales se abren automáticamente para mejorar la calidad del aire, refrigerar y, además, oxigenar el ambiente. También están dotados con medidas de seguridad y, si se produciese algún incendio, se abrirían automáticamente», ha asegurado.
Esta inversión, según ha considerado Chueca, es para que los detallistas, clientes y turistas que paseen, trabajen y compren en el Mercado Central puedan gozar de un mayor confort en los 6.806 metros cuadrados que tiene la instalación.
Consumo elevado
Además de regular la temperatura, ha subrayado que este acristalamiento pondrá fin a la merma de la eficiencia energética por la pérdida de calor que se genera en invierno, especialmente, y que provoca un consumo muy elevado de electricidad.
«Como saben, el compromiso del Gobierno de la ciudad es que realmente estemos siempre cerca de los detallistas y que podamos ayudarles a mejorar sus condiciones de trabajo», ha apostillado.
Además, ha añadido que la parte alta del Mercado Central acogerá estos ventanales de vidrio y carpintería de aluminio que se van a colocar por la parte exterior. No obstante, ha agregado que la ejecución de las obras también necesitara la ocupación interior.
«Esto se debe a la interferencia de muchos elementos arquitectónicos dentro del mercado que obligan a que los cerramientos se coloquen por fuera», ha asegurado Chueca indicando que también facilitará su limpieza y permitirá mantener las mallas antipalomas y antimosquitos.
Patrimonio de zaragoza
El edificio del Mercado Central 'Lanuza' constituye una pieza muy significativa dentro del patrimonio arquitectónico de la ciudad de Zaragoza y del panorama aragonés. Cuenta con la declaración como Bien de Interés Cultural hace ya 46 años y que se actualizó en 2002.
Su estilo puede enmarcarse dentro de una corriente ecléctica de finales del siglo XIX y supone un magnífico ejemplo conservado de la arquitectura en hierro. Fue proyectado por Félix Navarro Pérez en 1895 y los trabajos de construcción concluyeron en 1903.
La magnífica labor de arquitecto se vio acompañada por el trabajo de un grupo de artesanos que completaron y cuidaron la factura y el carácter decorativo del edificio en los diversos elementos constructivos.
En el año 2020, el arquitecto José Antonio Aranaz dirigió los trabajos de rehabilitación trayendo el edificio hasta hoy como un equipamiento paradigmático dentro de la ciudad.
Construido con estructura de hierro fundido y laminado, el edificio tiene un diseño perfecta y armónicamente adecuado a su función, y se organiza según una planta rectangular basilical de tres naves, en la que la central es más ancha y elevada que las dos laterales.
Los mercados en zaragoza
La ciudad tiene 37 mercados fijos, tres de ellos municipales --Central, San Vicente de Paúl y Valdespartera, que gestiona Mercazaragoza-- y 34 privados asociados en ZAMAS.
Además, se desarrollan durante la semana 8 mercados ambulantes en distintos puntos de Zaragoza, lo que deja la cifra global en 45 mercados. En las instalaciones fijas, hay 351 detallistas, de los que 71 gestionan puestos en mercados públicos.
En concreto, en este Mercado Central hay 53 detallistas trabajando en 69 puestos --algunos tienen varias concesiones--, lo que supone un 88 por ciento de ocupación.
En Valdespartera hay 15 puestos de los que se encargan 12 detallistas y está al completo, mientras San Vicente de Paúl, inmerso en pleno proyecto piloto de revitalización, acoge 26 puestos, de los que hay 11 ocupados por 6 detallistas
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