Archivo - Planta de Seat en Martorell (Barcelona). | SEAT - Archivo

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Seat cerró el primer trimestre del año con un beneficio de 226 millones de euros, un 57% más que en el mismo periodo del año pasado, ha informado en un comunicado este jueves.

Los ingresos fueron de 3.803 millones de euros, un 6,8% más y la mayor cifra en un primer trimestre, mientras que la rentabilidad operativa sobre las ventas pasó del 4% al 5,9%.

En declaraciones a Europa Press, el ceo de la empresa, Wayne Griffiths, ha dicho que es «bastante impresionante» aumentar el beneficio en un 57% con un incremento de los ingresos del 6,8%.

Griffiths ha detallado que el crecimiento de Cupra fue del 20% y que el de Seat fue del 4%: «Es importante que las dos marcas crecen».

Ha remarcado el papel de la rentabilidad de los vehículos de la marca Cupra en la mejora de los resultados, y ha añadido que también se debe a la reestructuración y la transformación de la empresa.

La compañía ha explicado que la mejora de resultados también está impulsada por el «crecimiento sostenido del volumen de entregas», que aumentaron un 10,6%, hasta 138.600 vehículos.

Por marcas

Cupra cerró el primer trimestre habiendo entregado 56.600 coches, un 21,4% más, y logró su mayor número de ventas en un mes en marzo, con 23.800 entregas.

El modelo Formentor vendió 28.900 unidades, un 3,5% más, y fue seguido por el León, con 15.900 entregas, un 107% más.

Seat, por su parte, entregó 81.900 unidades, un 4,3% más, y el modelo Ibiza fue el más vendido, con 25.700 coches.

Resto del año

Griffiths ha explicado que es «muy difícil» avanzar cómo será el año a causa de las disrupciones en las cadenas de suministros, el impacto de la guerra de Gaza y la competencia de China y Estados Unidos.

Sin embargo, ha dicho que la empresa está en un «punto dulce» de su desarrollo y que debe mantener el ritmo para poder afrontar los retos que ha previsto que habrá en el segundo semestre del año.