Numerosos amigos, junto a sus familiares, despidieron ayer a
Antonio García-Ruiz Rosselló, arquitecto y presidente de la Real
Academia de Bellas Artes de Sant Sebastià de Palma, fallecido el
pasado jueves.
El funeral por su alma se celebró en la iglesia de Sant Jaume,
que se llenó de público bastante antes de que comenzara el oficio
religioso. En el mismo se recordó la personalidad del finado y la
serenidad en los últimos momentos de su vida. Tanta fue la gente
que asistió al templo que mucha no pudo entrar y tuvo que quedarse
fuera.
Entre quienes acudieron a darle su último adiós estaban sus
compañeros académicos. Entre otros, Juan Miralles, Pere A.Serra,
Ramon Canet, Pepe Pardo, Francesc Conrado de Villalonga o Jaume
Mir. Hubo muchos artistas y galeristas: Maria Carbonero, Pep
Llambías, Lourdes Sampol, Amador Magraner, Joan Costa, Steve Afif,
Tofol Sastre; Pep Pinya, Xavier Fiol, Bernardo Rabassa, Jerónima
Martínez, Patricia Estrada y Marieta Güall. Y otros amigos,
empresarios o políticos como Francesc Verdú; Margalida Magraner y
Carmen Serra; Juan Fierro; Marieta Salas; Rosa María Regi y
Fernando Rotger; Ferran Trujillo; Tomeu Sitjar o Lorenzo Fluxà.
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