El 'caixer fadrí', Marc Ribó, en el Pla de Sant Joan. | Javier Coll

TW
0

Las fiestas de Sant Joan avanzan en Menorca y llega uno de los momentos más espectaculares y más esperados: los Jocs des Pla des Vespre. Este año, y por segundo año consecutivo, se han caracterizado por haber transcurrido sin incidencias importantes y el buen juicio de los asistentes, que han respetado en todo momento el senderos. Los caballos han podido correr tranquilamente por el pasillo ancho que abrían los asistentes, gracias también al buen trabajo de los 65 voluntarios que se han puesto

Al igual que el año pasado, la Qualcada ha bajado al Pla con plena luz del día. Las ocho menos cuarto la música y las autoridades ya bajaban y luego los caballos y jinetes. Con ellos, la multitud de gente. A las ocho de la tarde eran 8.000 las personas contabilizadas en el Pla y sólo veinte minutos más tarde esta cifra se ha duplicado. A las nueve menos cuarto ya eran 22.000 los asistentes. Finalmente, a las 21:20 se han cerrado los filtros de acceso con un aforo en el puerto de 28.898 personas.

Noticias relacionadas

La fiesta se ha desatado con la llegada de la Qualcada y un primer caragol con las notas del jaleo.

Y así ha llegado el momento del primero de los juegos: el del ensortilla, este año con más acierto. Ocho caballeros han adivinado la anilla, el doble que los cuatro que se consiguieron el año pasado.

Los juegos se han completado con las espectaculares pruebas de romper las máscaras y correr abraçats.