Comenzó de aprendiz con un amigo de su padre, Gabriel Palmer, quien pronto delegó en él la mayoría del trabajo para poder dedicarse a su profesión como delineante de la Jefatura de Aviación. La ardua tarea, siempre como autónomo, que llevó a cabo en todos aquellos años, –«trabajaba 13, 14, 15 y hasta 16 horas al día, domingos y festivos incluidos»–, es definida por el artista «como un trabajo al que no le di la importancia que ahora le dan».
Su trabajo llamó la atención de Verónica y Tomeu Fiol, quienes lo conocieron cuando preparaban su libro Els cinemes de Palma, publicado en 2015. Tras recoger información sobre el personaje y tratarlo personalmente, se decidieron a preparar su próxima obra con él como protagonista absoluto. Llevará por título Rafel Ruiz, l’home que pintava pel·lícules. Vida i obra del cartellista dels cinemes de Palma, y será editada también por Òrbita.
«Es impresionante la producción de Rafael Ramis –explica Tomeu–. Lo hacía todo él, con jornadas maratonianas, dependiendo de los estrenos. Era capaz de hacer un cartel en dos días. El sector era él».
Rafael, que no ha vuelto a coger un pincel desde que se jubiló definitivamente en 2005, sigue cultivando su faceta de cinéfilo, aunque son pocas las películas que le satisfacen actualmente. Una de ellas ha sido Moonlight, reciente ganadora del Oscar a Mejor Película. Vive a caballo entre Palma y Lloseta para visitar a sus nietos, cocina –le gusta mucho–, lee y mira la televisión «lo justo», sobre todo documentales.
«Lo mío era artesanal y se acabó; tuvo mérito y ya está», concluye.
2 comentarios
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Un gran artista i molt bona persona, ell i tambè la seva familia que la recordo amb molt de carinyo.En Rafa fill anava a la escola en el meu fill i de ben petit ja la feia caricatures,...era un encant !!
Un 10 per en Rafael, tot un artista.