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YouTube, el canal de contenidos en vídeo de Google, ha realizado recientemente un radical cambio en sus normas para los vídeos en los que permite monetizar: las Directrices de contenido adecuado para anunciantes. La gigante tecnológica asegura que el contenido que puede ser adecuado para YouTube no tiene porque serlo para su programa de ads.

Entre este contenido que se considera “inadecuado para anunciantes” se incluyen:

Escenas de carácter sugerente, incluidos desnudos parciales y humor verde.

Violencia, incluidas imágenes de lesiones graves y acontecimientos relacionados con el extremismo violento.

Lenguaje inapropiado, incluido el acoso, las obscenidades y el lenguaje vulgar.

Incitación a la venta, el consumo o el abuso de drogas y sustancias reguladas.

Acontecimientos y asuntos controvertidos y delicados, como conflictos bélicos o políticos, desastres naturales y tragedias.

Esta decisión ha causado un revuelo entre todos los generados de contenidos de la plataforma. No ha dejado indiferentes a los youtubers, sobre todo a los más reconocidos, cuyos contenidos se verán afectados y que obtenían ingresos de hasta 500-700 $/día.

Aun así la reacción de muchos youtubers no ha sido la de autocensura sino todo lo contrario, incluso se ha creado el hashtag #YouTubeisoverparty para mostrar su desacuerdo.

Entre otros, El Rubius ha lanzado un vídeo dedicado al tema, en el que comienza muy zen y jugando al Minecraft y termina incumpliendo los diferentes puntos de la normativa de modo irónico. El vídeo ya sobrepasa los 6,5 millones de visitas.

En una sociedad en la que los youtubers son referentes de muchos jóvenes parece adecuada la medida. Sin embargo, la censura puede conseguir un efecto opuesto. Quizá YouTube dé marcha atrás, quizá aparezca otra plataforma que no censure. Veremos qué harán los reconocidos youtubers en los próximos meses.