Las ferias, y especialmente la World Travel Market, son un magnifico termómetro para medir las percepciones sobre la situación económica en los destinos turísticos. Cuando las cosas van mal las delegaciones de empleados públicos y políticos que acuden a Londres son pequeñas, pero van creciendo a medida que se percibe que la economía mejora y que no habrá muchas críticas locales por el gasto de unos cuantos miles de euros. Por supuesto, la mayor parte de ellos ni hablan inglés ni tienen una agenda de entrevistas en la capital británica que justifique el viaje, pero como van acompañados de los medios locales y necesitan fotos para publicar en casa, se reúnen entre ellos y si pueden con los representantes de la Oficina Española de Turismo en Londres que se ve obligada a encontrar tiempo disponible en unos días agitados.
Se acabó la crisis
17/11/17 11:04
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