En 1990 la doctora Busquets y Magdalena Polo ponían en marcha la
Asociación Balear de Parkinson. Ahora, ocho años después la nueva
junta recientemente nombrada se ha marcado el reto de impulsar
dicha asociación y lo primero que ha hecho ha sido «independizarse»
de la coordinadora de minusválidos "donde están integradas una
treintena de asociaciones" y con las ayudas institucionales
inaugurarán el próximo día 29 de enero sus propias instalaciones en
la calle Guillem Forteza, 6.
Cristobal Carrió, tesorero de la asociación, señala que no se
trata de que el centro sea un local de reunión de la tercera edad
sino un lugar «donde poder compartir experiencias que nos ayuden en
nuestra enfermedad». Así, habrá conferencias, vídeos y mesas
redondas con profesionales sobre el Parkinson.
No obstante, la principal novedad es que se dispondrá de un
centro de rehabilitación donde los asociados podrán realizar, bajo
el control de un fisioterapeuta, los ejercicios físicos «que nos
son tan necesarios para nuestra rehabilitación». «Es básico para
nosotros, junto con las medicinas, el ejercicio físico y los
masajes para reactivar los músculos».
Nueva junta directiva
La nueva junta directiva de la Asociación Balear de Parkinson está
presidida por Antonia Vidal que sustituye a Magdalena Polo quien
hace tres meses dimitió por problemas de salud. Isabel Gómez es la
vicepresidenta y Damián Verger el secretario. Cristobal Carrió es
el secretario de esta asociación que con su «independencia» de la
Coordinadora de Minusválidos abre una nueva etapa en la que se
quiere impulsar la puesta en común de problemas y fomentar la
rehabilitación y el ejercicio físico como claves para una mejora
sensible de la enfermedad.
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