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Llegó, ¡por fin! el «Fortuna» Aunque se sabía que el «Fortuna» podía llegar de un momento a otro, aquella mañana del 16 de agosto de 1979 fue una sorpresa verlo en el muelle de la base naval de Portopí. Alguien, días atrás, habían dicho que el Rey y su padre, don Juan de Borbón, conde de Barcelona, irían a Tarragona a buscarlo, aunque, como suele ocurrir siempre, nadie especificó cuándo. Pues bien, fueron a por él el 15, y cuando llegó lo amarraron en un lugar que quedaba lejos del alcance de los ojos escrutadores que merodeaban por el Passeig Marítim. años después, con numerosas averías en su haber y habiendo transportado a importantes personajes de la realeza mundial, así como jefes de Estado y de Gobierno, el «Fortuna» "el segundo de la estirpe, pues el primero, al llegar éste, pasó a ser propiedad del marqués de Mondéjar, quien lo rebautizó con el nombre de «Trinidad III»" pasa a mejor vida y su espacio es ocupado por este otro «Fortuna» que anteayer llegó a Palma y que hoy les mostramos en otras páginas de este diario.


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