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J. RODRÍGUEZ/C. RUIZ Una veintena de transportistas de contenedores de escombros se concentraron ayer frente a la Conselleria de Medi Ambient para protestar por la orden de cierre de la cantera de Can Set al entender que en la zona se estaban quemando materiales nocivos para la salud y que se incumplían las normas a la hora de seleccionar dichos restos de obras.

El portavoz de los concentrados, Monserrat Barceló, poco antes de entregar un escrito de protesta dirigido a la consellera, Margalida Rosseló, negó que no realizarán la selección de escombros, «ya que en la cantera almacenamos más de 2.000 colchones a la espera que las autoridades nos digan que hacer con ellos», y que estuvieran quemando desechos nocivos para la salud, «las maderas y fibras de la construcción fermentan al estar al aire libre y eso produce el humo y un poco de mal olor, pero solo es eso humo».

Los transportistas de contenedores, que representaban a más de 20 empresas de la zona de la Bahía de Palma recordaron que, en la actualidad, y en toda Mallorca, hay más de 90 vertederos ilegales y, en este sentido, solicitaron a Rosselló «su cierre inmediato» ya que, aseguraron «tenemos constancia de que en estos sitios no realizan ningún tipo de selección de residuos». Barceló aludió a la «injusticia» y al «agravio comparativo» que supone cerrar la cantera donde descargan los miembros de la Asociación de Transportistas de Contenedores de Balears, ASTRACOMA, y solicitó una solución a su problema ya que, hasta entonces, no pueden trabajar.

En la actualidad, según el portavoz de los transportistas, se descargan en la cantera una media de 250 contenedores diarios por lo que su cierre, aseguró, puede afectar a las constructoras, que son las que tienen que almacenas los escombros hasta que se encuentre un lugar donde hacerlo. En este punto, Barceló aseguró que se pueden producir situaciones de riesgo ya que las constructoras están empezando a almacenar escombros en las propias obras, «y alguna se puede venir abajo por la acumulación de material».