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Un 10 por ciento de las embarcaciones de la flota pesquera balear se ha dado de baja desde 1994, aunque el sector mantiene cierto dinamismo en su actividad. Con 700 naves y 1.500 personas trabajando en la flota actual, los pescadores profesionales de Balears presentaron en 2002 un total de 25 solicitudes de ayudas europeas (en el marco de un programa que se prolonga hasta 2006) para la construcción de nuevas embarcaciones y 84 para la modernización de ya existentes.

Lo que demuestra, según el director general de Pesca, Sebastià Coves, que «el sector aspira a ser rentable y a garantizarse el futuro, incorporando a jóvenes y con una explotación razonable de los recursos pesqueros. Por nuestra parte, desde la Conselleria d'Agricultura i Pesca vamos a iniciar en breve una campaña de promoción del pescado fresco de Balears, ya que una mejor comercialización del producto incide directamente en la continuidad del sector».

Por otra parte, Coves y el conseller Mateu Morro anunciaron ayer la celebración de la I Jornada Pesquera de Balears, que tendrá lugar el próximo sábado en Establiments y pretende sentar las bases de futuro para el sector a partir de «la «preservación y la buena gestión de los recursos». Esta jornada ha sido organizada por la Conselleria con el objetivo, según Morro, de «abrir un foro de debate y análisis permanente en el que pescadores, científicos, investigadores y Administración puedan orientar una gestión que asegure el correcto desarrollo del sector, así como rendir un homenaje público a los profesionales del mar».

El encuentro tendrá lugar en el restaurante Molí des Comte y, de acuerdo con el recuento de las preinscripciones facilitado por la Conselleria, en él participarán más de 200 personas, que en su mayoría pertenecen a las 16 cofradías de Balears. Uno de los ejes centrales de la jornada será el estado actual de las reservas marinas y su consideración como «instrumento de gestión dirigido a la protección de los recursos pesqueros, su regeneración y su explotación sostenible y equilibrada», en palabras de Coves.

El director general indicó que actualmente existen cuatro reservas marinas -localizadas en la Badia de Palma, els Freus d'Eivissa i Formentera, Nord de Menorca y Migjorn de Mallorca-, que suponen la protección de 38.000 hectáreas marinas preservadas. Coves destacó que estos datos «suponen un nivel de protección que supera la media estatal y mundial. Un 30 por ciento del total del medio marino protegido en España se encuentra en Balears».