TW
0

El Conseller de Economía i Hisenda, Lluís Ramis d'Ayreflor, anunció ayer en comisión parlamentaria que el Govern deberá de buscar financiación externa para acometer nuevas inversiones en el año 2004, ya que tiene comprometidos todos los ingresos previstos en el presupuesto del año que viene. Ramis d'Ayreflor señaló que los gastos de los capítulos uno y dos de los presupuestos de la Comunitat, que corresponden a las partidas de personal y servicios corrientes, más las inversiones comprometidas por el anterior Ejecutivo, suman los 1.840 millones de euros de ingresos previstos para el año que viene.

Eso significa que el Govern de Jaume Matas deberá de buscar financiación externa, procedente principalmente de la administración central, europea y en menor medida aportaciones privadas, para acometer nuevas inversiones en las Islas. Esos 1.840 millones de euros suponen a su vez un crecimiento del 4 sobre 2003, una vez descontado el valor del impuesto turístico, lo que situará el presupuesto de 2004 en los valores del año 2002. Ramis d'Ayreflor dijo además sentirse «asustado por la cantidad de facturas que tenemos en el cajón» procedentes del anterior Govern y sin partida presupuestaria asignada y anunció que su departamento aplicará el principio de «contención» en la elaboración de los presupuestos de 2004.

Por otra parte, indicó que la coyuntura económica «no es óptima» y que Balears padece una «preocupante» situación de «anemia económica». Ramis d'Ayrefor señaló que su departamento negociará la transferencia de las competencias de Justicia previstas para el 2004 y señaló que el Régimen Especial Balear (REB) será gestionado por Vicepresidencia. El conseller anunció que tratará de atraer a empresas del exterior para que se instalen en el Parc Bit, donde tiene el propósito de complementar la oferta existente con un área de servicios. El estudio anual de gasto turístico lo realizará la UIB y en la supresión del impuesto de sucesiones afectará sólo a los menores de 21 años a partir del próximo ejercicio económico. Además, su departamento destinará cinco millones de euros de la UE a proyectos de nuevas tecnologías.