Delegados sindicales concentrados frente al hospital de Son Llàtzer.

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Los sindicatos sanitarios rechazaron ayer de forma rotunda que la sanidad balear vea «recortado» su presupuesto para el próximo año 2010 en 100 millones de euros, según la propuesta que ayer se debatía en el Parlament, porque «esta injustificable e irresponsable decisión del Govern» supondrá, según los sindicatos, un «notorio y gravísimo perjuicio» para los ciudadanos de las Islas.

Durante el día de ayer se llevaron a cabo dos concentraciones -una frente al hospital de Son Llàtzer y la otra frente a la Conselleria d´Economia- en defensa de la sanidad pública y por el cumplimiento de los acuerdos firmados.

La Comisión Permanente de la Junta de Personal del Àrea de Salud de Mallorca remitió ayer un comunicado en el que precisaban que las víctimas del recorte del presupuesto serán «los usuarios de la sanidad pública» y los 16.000 trabajadores sanitarios y no sanitarios que pertenecen al Sistema Público de Salud de las Islas.

Por su parte la diputada del grupo parlamentario popular, Carmen Castro, pidió ayer la retirada de los presupuestos previstos para la Conselleria de Salut, al considerarlos 'regresivos' y porque «no se ajustan a la situación actual ni dan respuesta a las necesidades de la sanidad pública de las Islas», dijo en declaraciones a Europa Press.