Una barca de pesca tradicional faena en las aguas del archipiélago de Cabrera. | M. Joy

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La Federación Balear de Cofradías de Pescadores califica de «sinsentido» la posibilidad de crear nuevas zonas de protección marina en el archipiélago de Cabrera, dados los escasos recursos que posee la Administración autonómica para gestionar y controlar las actuales reservas. En este sentido, la organización pesquera pide una mayor dosis de «sentido común y realismo» al Gobierno central y a la organización ecologista Oceana en sus propuestas.

El secretario de la federación de cofradías, Toni Garau, explicó ayer en rueda de prensa que se ha solicitado de forma preventiva al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente la retirada del proyecto que contempla la creación de áreas marinas protegidas en la zona donde se encuentran las montañas submarinas del banco Emili Baudot y Ausiàs March, en el Canal de Mallorca, y en una zona en el área oriental del Parque Nacional de Cabrera, conocida como Fort den Moreu.

Según Garau, la federación se muestra «sorprendida y decepcionada» por la tramitación de esta propuesta de Orden Ministerial, ya que, a su juicio, «se ha hecho de forma súbita y sin ningún tipo de consenso ni acuerdo con el sector, y sin la acreditación científica que requiere la aprobación de una norma de esta envergadura», señaló.

El secretario de la Federación Balear de Cofradías de Pescadores aseguró también que la organización «no cierra las puertas a una protección de las montañas submarinas de Emile Baudot y de Ausiàs March, pero sí reclama la posibilidad de un acuerdo respecto al área oriental de Cabrera, al menos mientras no se cuente con la acreditación científica pertinente que así lo recomiende», especificó.

Finalmente, Garau reconoció que el colectivo pesquero está mucho más interesado en mejorar la gestión de las áreas protegidas ya existentes, tanto las de gestión autonómica como las de gestión compartida con el Estado.