Antonio Alemany empezó a cumplir la condena de dos años y tres meses de cárcel impuesta por el Tribunal Supremo el pasado 1 de septiembre, momento que recoge la fotografía. El periodista está «muy encerrado en sí mismo y no se mezcla con otros reclusos». | J. TORRES

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El periodista que le escribía los discurso a Jaume Matas Antonio Alemany Dezcallar no ha abandonado la enfermería de la cárcel de Palma desde su ingreso, el pasado 1 de septiembre. La dirección del recinto penitenciario le ha asignado un preso de apoyo, un inmigrante de color.

Según las fuentes consultadas por este diario, motivos de salud justifican que Alemany continúe en la enfermería del recinto penitenciario. Sufre de sordera y ha solicitado un aparato para reducir su pérdida auditiva.
«Lee, escribe, probablemente sus memorias, y ha solicitado un ordenador personal. Está muy encerrado en sí mismo y no se mezcla con otros presos considerados peligrosos», señalan personas que conocen los detalles de la estancia del periodista en la cárcel. Alemany, de 75 años, alegó motivos de salud para retrasar un mes su entrada en prisión.

Alemany superó el proceso de iniciación que todo recluso debe afrontar en sus primeros días de cárcel ayudado por un preso de apoyo, que le acompaña y está pendiente de él en todo momento. Cumple con todos los horarios impuestos y nunca baja a la zona común visitada por otros reos. «Es optimista y espera conseguir muy pronto el tercer grado», explican las personas de su entorno.

La dirección del centro penitenciario están estudiando la petición del periodista de disponer de un ordenador y, en ese caso, como es preceptivo, sin acceso a internet. Su intención es escribir un libro con sus memorias y su experiencia como recluso.

Alemany fue condenado por el Tribunal Supremo a dos años y tres meses de cárcel por los delitos de malversación de caudales públicos, falsedad y tráfico de influencias. El Gobierno de Mariano Rajoy rechazó en julio la petición de indulto que había presentado a través de su abogado, Javier Fernández, pero la Audiencia de Palma accedió a suspender su ingreso a lo largo de todo el mes de agosto, atendiendo a su estado de salud.