La peatonalización de la calle Fàbrica ha supuesto una proliferación de terrazas de bares y restaurantes en la zona.

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Los restauradores han iniciado un frente común contra el adelanto del cierre que ha aprobado el Ajuntament de Palma.

El presidente de la Asociación de Restauración de Mallorca, Alfonso Robledo, informa que los empresarios de la calle Fábrica y la zona de sa Llotja han contratado un bufete de abogados para intentar evitar que entre en vigor la medida adoptada por el Consistorio palmesano.

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La Asociación de Restauración de Mallorca ha convocado una reunión para este lunes en los que los abogados explicarán las alegaciones que se pueden presentar. Además, les propondrán presentar un recurso contencioso-administrativo si el gobierno municipal no acepta las alegaciones y lleva a cabo el adelanto del cierre de las terrazas, así como de los bares y restaurantes en algunas calles concretas. Los interesados pueden presentar alegaciones hasta el próximo 13 de enero.

Los técnicos municipales proponen elaborar un plan zonal para la calle Fàbrica y la Llotja que supone adelantar una hora el cierre de las terrazas en verano, que es cuando se producen los problemas de ruido. Las terrazas tendrán que cesar su actividad a las 23.30 horas todos los días en temporada alta, así como los viernes, sábados y vísperas de festivos en temporada baja. Las terrazas de Atarazanas cerrarán todos los días a las 00:00 horas, media hora antes que ahora.