La regularización de plazas tenía como objetivo resolver determinadas situaciones que el crecimiento precipitado arrastraba desde hacía años y, al tiempo, garantizar la calidad de la oferta turística.

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Los hoteleros de Mallorca han regularizado 5.527 plazas en los últimos seis años gracias al decreto ley de medidas urgentes para el impulso de la inversión en Balears, aprobado en 2009 por el segundo Govern de Pacte, y a la posterior prórroga concedida por el Ejecutivo de José Ramón Ramón el pasado 17 de julio de 2015. El plazo formal finaliza este domingo, por lo que este viernes fue el último día para solicitar la regularización de plazas, lo que provocó la entrada de una avalancha de peticiones en la Conselleria de Turisme.

La regularización de plazas se concedía previo pago a la Administración, de modo que las arcas públicas han ingresado gracias a este concepto 28,13 millones de euros, según informó el departamento que dirige el vicepresident Biel Barceló.

Estos fondos están gestionados por el Consorci de la Borsa de Places Turístiques y deben destinarse a finalidades de mejora de infraestructuras turísticas, a incentivar la reconversión de establecimientos de alojamiento turístico, y a diversificar y desestacionalizar la oferta turística. Los proyectos que se lleven a cabo deben ser aprobados por el Consorci y ya se han ejecutado varias obras en zonas costeras de la Isla.