Imagen de archivo de la zona donde antes se celebraba el botellón en el Passeig Marítim. | Redacción Digital

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Los empresarios del ocio nocturno de Balears están «muy preocupados» por la decisión del Tribunal Superior de Justícia de Balears (TSJIB) de anular la ordenanza cívica, ya que «ahora mismo, Cort no regula ni el trile, ni la venta ambulante, ni el botellón».

Jesús Sánchez, el presidente de la asociación de salas de fiestas de Balears (ABONE), afirmaba este lunes que los empresarios han puesto ya «mecanismos en marcha» para solucionar esta situación porque «nos vemos a las puertas del principio de la temporada sin una regulación para temas que nos preocupan desde hace años, sobre todo en Platja de Palma».

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La preocupación es, según Sánchez, compartida con Cort, ya que tanto el alcalde, José Hila, como la regidora de Turisme, Joana Maria Adrover, le aseguraron estar trabajando por ver «dónde se puede sujetar la policía para seguir trabajando» hasta que se resuelva esta situación. Mientras tanto, desde ABONE solicitarán una reunión urgente de la comisión de seguridad de la Platja de Palma «en la que esté la Policía Nacional» porque la coordinación con la Local «en muchos casos deja mucho que desear».

Por su parte, en el PP, impulsor de la ordenanza ahora anulada, aseguraron estar «muy tranquilos» con la decisión judicial porque en su momento cumplieron «con todos los trámites jurídicos».