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El Consejo de Capitalidad de Palma, del que forman parte el Govern, Consell de Mallorca y el Ajuntament de Palma, ha concluido este jueves sin lograr cerrar un acuerdo en torno a las partidas previstas para 2017, que en total suman 30 millones de euros anuales derivados de la Ley de Capitalidad.

Tras la reunión celebrada en el Consistorio, el alcalde de Palma, José Hila, ha explicado a los medios de comunicación que el motivo principal del desacuerdo son las diferencias que existen en torno a los 19,5 millones de euros correspondientes a las compensaciones que debe recibir la capital balear «debido a que hay distintos criterios de cálculo entre las dos partes» -Govern y consistorio-.

Con todo, Hila ha señalado que la «buena noticia» es que hay consenso en relación a la partida de inversiones directas, que se eleva a 10,5 millones de euros, y que se destinarán a proyectos culturales, a las barriadas de la ciudad y a la adquisición de nuevos de autobuses, tal y como ha avanzado.

En concreto, el alcalde ha mencionado una partida de 1,5 millones para la compra de autobuses de la EMT y otros 1,5 millones para la rehabilitación de la antigua fábrica de Can Ribas y Ses Voltes, entre algunas de las iniciativas previstas.

De los 10,5 millones que se destinarán a inversiones; 5,5 millones los aporta el Govern -cantidad de libre disposición- y otros 5 millones el Consell de Mallorca -de los que 3 millones se destinarán a infraestructuras viarias y los otros 2 también serán de libre disposición-, ha concretado.

En cuanto a la parte de las compensaciones, el primer edil ha constatado que no se ha llegado a un acuerdo «porque hay diferentes criterios técnicos en los que las dos partes tienen que dar el visto bueno».

«Debido a que acuerdo no se ha producido, consideramos mejor posponer el Consejo de Capitalidad hasta que exista la certeza de que, a la hora de valorar las compensaciones, coinciden las mismas cuantías», ha aseverado al respecto.

Palacio de Congresos

Hila ha avanzado que una de las cantidades en la que hay desacuerdo entre el Ejecutivo autonómico y el consistorio se refiere a la aportación que se debe pagar para el Palacio de Congresos de Palma, si bien no ha querido precisar qué otras cifras están en negociación.

Según ha explicado el alcalde, esperan que «cuanto antes» se salven estas diferencias, «una vez que los técnicos se pongan de acuerdo con las cantidades», a fin de poder convocar el Consejo de Capitalidad para aprobar las partidas definitivas.