Ayer se desmontaron las casetas de la Plaça Major. | Julián Aguirre

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Mientras los puestos del Mercadet de Nadal en la Plaça Major y La Rambla comenzaban ayer a desmontarse, en las plazas de España y la Porta Pintada, de Palma, aún atendían a los clientes, que aprovechaban las últimas ofertas antes del cierre de hoy, que se prolongará hasta la próxima Navidad. Los artesanos y vendedores definen esta temporada de «igual o un poquito peor que la del pasado año».

«Las grandes superficies, que abren prácticamente todos los festivos, nos ha hecho mucho daño», apuntan Fernando y Alejandra en su caseta de bisutería instalada en La Rambla. Algo más optimistas se mostraban Reinaldo Mauro, Roxana y Silvia, en la plaza de España: «El cliente, la mayoría residentes, compran más antes de Navidad que para Reyes».