Imagen de la reunión celebrada entre ambas administraciones. | CAIB

TW
13

Los gobiernos balear y catalán compartirán las bases de ADN de familiares para tratar de identificar los restos de los milicianos exhumados en el cementerio de Son Coletes de Manacor, en cuya costa desembarcaron las tropas republicanas para arrebatar Mallorca al ejército franquista durante la Guerra Civil.

Así lo han acordado el director general de Memoria Democrática del Govern balear, Marc Herrera, y su homóloga en Cataluña, Gemma Domènech, ha informado este miércoles la Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática.

El Govern balear y la Generalit de Catalunya compartirán los informes de ADN de los que dispone el Hospital de la Vall d’Hebron de Barcelona realizados a los familiares de posibles víctimas del desembarco del comandante republicano Alberto Bayo en las costas del levante mallorquín en agosto de 1936.

A día de hoy, el departamento de Justicia de la Generalidad ya ha conseguido localizar a familiares de 27 posibles víctimas, de las cuales 17 ya se han sometido a las pruebas de ADN y cinco más lo harán en breve.

Seguidamente, ambas administraciones compartirán estos datos y se cotejarán con la información genética de los restos exhumados en Son Coletes.

Las tareas de exhumación del cementerio de Son Coletes, con ocasión del segundo Plan de Fosas del Govern balear, finalizaron en agosto pasado tras dar con 18 víctimas de la represión franquista de la Guerra Civil.

Tres de estas víctimas ya han sido identificadas: Antoni Alomar Mas, Francesca Llull Font y su hija, Francesca Salas Llull, todos ellos vecinos de Manacor.

Entre los restos también fueron localizados, como mínimo, seis milicianos de las tropas de Bayo que habrían luchado en la primera línea del frente del levante de Mallorca, de acuerdo con su vestimenta y los objetos recuperados.

La mayoría de estos milicianos procedían de Cataluña, por lo que la colaboración de los gobiernos balear y catalán es fundamental para su identificación.

Por ello se ha acordado iniciar los trámites para compartir los perfiles genéticos de los familiares del programa de identificación genética de la Generalitat, para que se puedan cruzar con el ADN de los restos mortales de las fosas donde fueron enterradas las víctimas del desembarco en Mallorca.

Actualmente, la Generalitat ha contactado con 90 ayuntamientos de Cataluña y del resto de España que corresponden a los municipios de procedencia de las víctimas del desembarco.

Están documentados los datos biográficos de 200 posibles personas muertas o desaparecidas en los enfrentamientos a partir de una lista inicial de los historiadores Jordi Oliva y Gonzalo Berger.

Los ejecutivos balear y catalán firmaron un convenio en septiembre de 2018 para colaborar en la búsqueda de personas desaparecidas durante la Guerra Civil y el franquismo.