Estrés, ansiedad, agotamiento, insomnio, apatía, culpabilidad e incapacidad para disfrutar. Son algunos de los sentimientos que acompañan a Irene Merino desde hace poco más de un año, cuando nacieron sus trillizos. «Yo, que siempre he sido una tía muy optimista, llegó un momento en que no era capaz de seguir viviendo», confiesa. La vida después de dar a luz no siempre es un camino de rosas, aunque las redes sociales se empeñen en mostrar una imagen muy diferente.
Depresión posparto: «Cada día me odio un poco más por no saber disfrutar de mis hijos»
Irene Merino, madre de 4 hijos, lleva meses medicada y en tratamiento terapéutico para luchar contra este trastorno mental
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5 comentarios
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Tenir fills està sobrevalorat. Ho pinten de color rosa i quan es troben amb la realitat comença la frustració. Na Nadine Gordiner, premi Nobel de literatura, ho explica benissim
Pues para estar tan mal va por 5 hijos. Yo tengo solo uno.
Mucho Ánimo. Ser padre es duro y de trillizos debe ser horrible. Después valdrá la pena.
Así como esta este mundo tener 4 hijos es una locura en si
Yo te voy a felicitar Irene, por tu valentía y fortaleza. El hecho de contar tu situación aquí, dice mucho de ti y reconocer que no estás bien es el primer paso para curarte. No estás sola en esto, apóyate en la familia y en los profesionales, verás como día a día van mejorando las cosas a mejor.