Estéticamente no se perciben grandes cambios, aunque muchos de los elementos exteriores han sufrido modificaciones para que sea más actual. | Miquel Àngel Llabrés

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Ya van nueve generaciones del Civic desde que allá por el año 1972 se presentara la primera versión, un modelo de dos puertas con motor transversal de 1169 cc y tracción delantera. El coche ofrecía un buen espacio interior a pesar de sus pequeñas dimensiones, una cualidad que también posee la última versión del modelo japonés.

ESTÉTICA
Esta vez, más que una nueva generación del Civic estamos hablando de un restyling, en el que se le han hecho algunos cambios estéticos exteriores para adaptarlo a las nuevas tendencias, además de darle un toque más deportivo, sobre todo en la versión Sport, que es la que hemos probado nosotros. Además, se ha añadido la posibilidad de equiparlo con el acabado Rally Red, que le da un aspecto mucho más radical. En poco tiempo llegará al mercado europeo la siempre esperada versión S-Type, con su aspecto más WRC.

De la parte delantera se han cambiado las ópticas, que ahora llevan la iluminación LED en su contorno, además de contar con lavafaros aunque no tenga faros de xenón, como es este caso. La parrilla delantera también es más deportiva con su forma de nido de abeja.

La parte posterior también ha recibido modificaciones en los faros, que ahora también son de LED, además de llevar un alerón en el color de la carrocería y un difusor negro en la parte de abajo del parachoques.

MOTOR
El propulsor que hemos probado es el 1.6 i-DTEC con tecnología Earth Dreams, que es sin duda uno de los mejores motores diésel que hemos probado y que nos ha resultado igual de convincente en el resto de las carrocerías de la marca. Una de sus claves es su poco peso, ya que es en gran parte de aluminio.

Los 120 CV de este motor esconden unas prestaciones de lo más sorprendentes con un cambio de marchas de lo más equilibrado, ya que las relaciones no son ni cortas ni largas, con lo que el coche empuja mucho y bien en cualquier circunstancia. De hecho, en sexta velocidad se puede adelantar tranquilamente sin tener que reducir marcha. La recuperación también es muy buena. El consumo es otro de los apartados en los que el 1.6 i-DTEC es la envidia de sus oponentes. Si bien la marca ofrece unas cifras de 3,7 litros a los 100 Km, esta no está muy lejos de los 4,8 que hemos conseguido nosotros en un recorrido mixto.

El comportamiento del Civic en carretera es de lo más dinámico, gracias a una amortiguación más bien dura que absorbe bien las irregularidades del terreno, sin que sea incómodo para sus ocupantes en ningún momento. En las curvas la tendencia a subvirar es mínima, lo que permite trazarlas a buen ritmo.

INTERIOR
El interior es otro de los apartados donde el Civic sorprende gratamente en prácticamente todos los apartados, Los ocupantes de las plazas posteriores tienen suficiente espacio para las piernas. El espacio para la carga también es de lo más interesante, ya que a los 477 litros del maletero (es muy profundo) se une el interesantísimo espacio que se puede conseguir con una fácil maniobra de plegado de los asientos posteriores.

El equipamiento de serie del nuevo Civic se ha visto mejorado con elementos tan interesantes como pantalla táctil con navegador, el pack de seguridad avanzada, climatizador bizona, cambio automático de luces de carretera, etc.