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OTR/PRESS-PAMPLONA Ayer se presentaron los compromisos públicos de la nueva Batasuna (Unidad), nuevo nombre de la formación abertzale HB. Su dirigente, Arnaldo Otegi, destacó que tres son los objetivos de Batasuna, como base del camino por el que solucionar «el conflicto político»: la constitución de un Estado vasco, la implantación del socialismo frente al neoliberalismo y la defensa de todos los derechos para todos los ciudadanos. Pero el cese de la actividad armada de ETA tan sólo tuvo una respuesta del 8% de los votos. La Nueva Mesa Nacional se presentará el próximo lunes.

Otegi resumió ayer en Pamplona los tres primeros compromisos públicos de la nueva Batasuna, que sustituye tras 22 años a HB: la construcción de un Estado vasco, la implantación del socialismo frente al neoliberalismo y la defensa de «todos los derechos para todos los ciudadanos en el conjunto del país» como base del camino por el que solucionar el «conflicto político». Añadió que Batasuna hará un emplazamiento próximamente a todas las organizaciones políticas y sociales «con absoluta humildad» e intención de llegar a un acuerdo sobre una solución «democrática», partiendo del tercer compromiso señalado, «todos los derechos para toda Euskal Herria», reiteró.

La nueva Mesa Nacional elegida se presentará mañana en la localidad navarra de Alsasua, donde mantendrá su primera reunión y dará una rueda de prensa. Previamente a Otegi tomaron la palabra Jean Claude Aguerre y Arantza Urkaregi. Aguerre aseguró que a lo largo del proceso Batasuna quedó claro que «no había temas tabú» y que los participantes han tenido oportunidad de «discutir» diversas cuestiones, hasta llegar al nacimiento de la nueva organización. «Damos un paso histórico», dijo Urkaregi en referencia a la asamblea nacional de Pamplona. Agregó que sin embargo, que ese paso no es «suficiente» y abogó por «hacer desaparecer la desconfianza y reunir a los que poco a poco se han ido desenganchando» de la formación abertzale radical.

La nueva Mesa Nacional está compuesta por 32 miembros en vez de los 25 actuales. Se despiden de la dirección personas de tradición en HB como Floren Aoiz, Karmelo Landa, Tasio Erkizia, Juan Mari Olano o Rufi Etxeberria. Sólo un 7'89% de los miembros de HB que participaron en el proceso Batasuna dieron su apoyo a una enmienda de la corriente Aralar que defendía la preeminencia de la acción política y, en este contexto, la necesidad de una tregua indefinida de ETA. Los miembros de la corriente Aralar decidirán y darán a conocer próximamente cuál es su análisis del proceso Batasuna de HB.

La mayoría de los partidos políticos vascos muestra su decepción
Los partidos políticos vascos mostraron su decepción tras conocer que las enmiendas presentadas por la formación abertzale contra la lucha armada han sido rechazadas. El portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti, aseguró que los miembros de Batasuna no han entendido los resultados electorales. Dijo que «se está creando una realidad artificial» y calificó de «mala noticia» que las enmiendas en contra de la actividad de ETA no hayan salido adelante. El PP dice que el proceso ha sido «la gran mentira» ya que sigue siendo la «tapadera» de ETA. Por su parte IU-EB se mostró también decepcionado por el resultado del proceso Batasuna y señaló que la nueva formación «carece de autonomía respecto a ETA y de credibilidad». Madrazo calificó el proceso Batasuna de «auténtico fracaso». Finalmente, EA calificó de «preocupante» que Batasuna no escuche el «clamor popular» pidiendo el alejamiento de ETA y el cese de la actividad armada.