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La exnovia de Jordi Pujol Ferrusola Victoria Alvarez ha afirmado este lunes que se siente «muy traicionada» por el PP y que tanto el jefe de gabinete de la Presidencia del Gobierno, Jorge Moragas --amigo suyo-- como la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, la dejaron sola «en el momento en que se complicó la cosa».

«Esperaba al menos, de quien me había metido en conversaciones y grabaciones y grabaciones, un poquito de apoyo», ha dicho en una entrevista en Antena 3 recogida por Europa Press.

Se refería así a su almuerzo en julio de 2010 con Camacho, que fue grabada por una agencia de detectives: según ha dicho, cuando ésto se supo, ella pensó que a quien grababan era a Camacho y que habían tenido «la suerte» de dar con esa conversación.

Alvarez ha criticado que «todo está bastante instrumentalizado», incluso el hecho de que su cruce de SMS con Jorge Moragas se publicase «después de la Diada».

Ha dicho que esos SMS formaban parte de la documentación que ella remitió a la Oficina Antifrau de Catalunya y que después, según le dijeron, estuvo «rodando por las mesas de CiU», y ha añadido que ella también tenía copia de ellos y que sufrió un robo en su casa.

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No ve ningún problema en el contenido de los SMS que le envió Moragas; sólo tal vez un problema «mediático», porque son personas «de confianza» desde hace años.

Sin embargo, admite que la frase 'si lo cuentas todo salvarás a España' fue «desafortunada» viniendo del jefe de gabinete del presidente del Gobierno: «Como si fuera Juana de Arco», ha ironizado, apuntando que salvar a España es más bien labor del Gobierno, no suya.

NADIE LA HA «COMPRADO»

Alvarez ha insistido en que ella está actuando por su cuenta y en que no la ha comprado nadie, y ha relatado que, desde que denunció haber visto a Pujol Ferrusola llevar dinero de Andorra a España, le han llegado nuevas informaciones de gente que teme que salgan sus nombres: «Me voy a convertir en la Oficina Antifraude de Catalunya, pero en la de verdad», ha ironizado.

Insiste en que también la mujer del expresidente Jordi Pujol, Marta Ferrusola, tenía un papel en los negocios familiares, y que tanto ella como su hijo mayor entraban en el Institut Català del Sòl «como Pedro por su casa» a firmar documentos.

También ha opinado que «no es casualidad» que compartieran el mismo banquero en Madrid Pujol Ferrusola, el difunto padre del presidente de la Generalitat Artur Mas y el expresidente del Palau de la Música, el imputado Fèlix Millet --que confesó haber desviado fondos del Palau de la Música--.