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La exdirigente juvenil del PSOE Beatriz Talegón ha rechazado la oferta del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, de ir en sus listas en las próximas elecciones generales, pero mantiene su «total disposición» a participar en plataformas de izquierdas, porque cree que el cambio en España pasa por dirigentes como Iglesias y los candidatos de IU, Alberto Garzón, y Equo, Juantxo López de Uralde.

Según ha explicado Talegón, tras anunciar su decisión de darse de baja del PSOE, el líder de Podemos se puso en contacto con ella para ofrecerle ir en sus listas al Congreso de los Diputados, una propuesta ante la que está «muy agradecida» pero que ha preferido declinar. La exdirigente juvenil ha señalado que, aunque valora esta oferta, su voluntad sería sumar en un proyecto más amplio, que incluyera a personas de otras formaciones.

De esta manera, tal y como avanzó este lunes en declaraciones a Europa Press, la exdirigente mantiene su «total disposición» a implicarse en un movimiento que tenga un equipo y ofrezca un cambio de izquierdas «de verdad».

Ahora que ya no milita en el PSOE, ha dicho, se siente «más libre» para trabajar en estos movimientos impulsados desde la izquierda y por partidos de izquierda, como Podemos, sin tener las «contradicciones internas» que le suponía formar parte del partido que dirige Pedro Sánchez.

El pasado 31 de enero, Talegón participó en la marcha convocada por Podemos en Madrid, lo que le valió críticas en el que era su partido. Ella defendió su asistencia explicando que había que «tender puentes» entre la izquierda.

Grecia, «la gota que ha colmado el vaso»

Ahora, y tras meses de reproches al PSOE, la posición de los socialistas en la crisis griega ha sido «la gota que ha colmado el vaso» para Talegón.

A su juicio, al haberse «posicionado con la Troika» en el conflicto entre el Gobierno griego y las instituciones europeas y no apoyar el 'no' en el referéndum convocado por Alexis Tsipras, el PSOE ha caído en la «consumación de la gran coalición», lo que no le deja otra alternativa que marcharse.

«Yo ya dije que en el momento que viera que el PSOE ha pactado con la derecha, me iría», ha afirmado. Con esta decisión, ha señalado, se demuestra que el PSOE «ni es de izquierdas, ni es socialista, ni tiene vuelta de hoja». «Con esta gente no hay nada que hacer», ha remachado.

Así lo ha dejado también claro en una carta que ha publicado en las redes sociales, en la que insiste en que tiene las «manos tendidas para trabajar con integridad, amor y sobre todo, con la autenticidad de la izquierda» y asegura que su compromiso es «más fuerte que nunca» con los valores de la igualdad de oportunidades, la solidaridad y la libertad.

En esta despedida, y pese a las críticas a la actitud «embustera» con Grecia del hasta ahora su partido, se muestra agradecida y «con un enorme cariño» hacia quienes le «han demostrado su integridad».

Eso sí, denuncia el «republicanismo abandonado» por el PSOE y las «trampas continuas el ninguneo sistemático y la protección de la dirección a los tramposos en lugar de a los ultrajados» cuando se trata de democracia interna.

Y asegura que ha visto «un partido político absolutamente vacío de ideas políticas, de formación, de criterio» y que está «ahogado por su actitud nihilista y arrodillado al marketing capitalista que trata a la ciudadanía (y a la militancia) como si fuera idiota por sistema».