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La Fiscalía de Sevilla ha informado favorablemente a la concesión del tercer grado o régimen de semilibertad para la tonadillera Isabel Pantoja, que cumple una pena de dos años de prisión por un delito de blanqueo de capitales y a la que se ha negado en dos ocasiones este grado penitenciario.

Fuentes de la Fiscalía han explicado que la decisión se ha adoptado tras el recurso de apelación presentado por la defensa de Pantoja una vez que el juzgado de vigilancia penitenciaria le denegó en septiembre, por segunda vez, el tercer grado, por el cual los reclusos pernoctan en prisión entre semana y el fin de semana están libres.

Para apoyar el régimen de semilibertad, la Fiscalía ha tenido en cuenta que Pantoja ha cumplido más de la mitad de la pena, que ha disfrutado de tres permisos sin incidentes y su buen comportamiento en la cárcel de mujeres de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), en la que ingresó el 21 de noviembre de 2014.

También han tenido en cuenta que la cantante ha pagado más de 700.000 euros de la multa que le impusieron, que fue de 1.147.148 euros, lo que ha hecho mientras cumplía la pena de cárcel.

Ese pago mientras estaba en la cárcel supone, según las fuentes, un arrepentimiento de su actitud delictiva y un reconocimiento de su culpabilidad.

Tras la decisión de la Fiscalía, ahora es la Audiencia de Sevilla la que debe pronunciarse sobre si se le concede o no el régimen de semilibertad a Pantoja.

En septiembre pasado, el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria 2 de Andalucía rechazó por segunda vez conceder el tercer grado penitenciario a Pantoja, que acabará de cumplir su pena el 8 de noviembre del 2016, porque consideraba que aún no estaba «capacitada plenamente» para ello.

En un auto fechado el 21 de septiembre, el juzgado resolvió el recurso presentado por el abogado de Pantoja contra la decisión de la Subdirección General de Tratamiento y Gestión Penitenciaria del 16 de julio del 2015 de mantener el segundo grado a la cantante.

La cantante, que ha disfrutado de dos permisos carcelarios y sufre una enfermedad renal, ejecutó entre el 2002 y el 2006 un plan preconcebido junto a su compañero sentimental, el exalcalde de Marbella (Málaga) Julián Muñoz -también en prisión-, «para aflorar dinero y ganancias», resaltó el juzgado.

Este dinero pretendían disfrutarlo en beneficio propio y se obtuvo de las actividades delictivas de Muñoz mientras era alcalde, «confundiéndolas con las procedentes de las actividades profesionales y mercantiles lícitas» de Pantoja, según el juzgado.

Para ello, ambos hicieron «multitud de operaciones tanto bancarias como en el ámbito mercantil con el fin de «blanquear» el dinero que el alcalde obtenía de actividades ilícitas, señaló el juzgado en su negativa a concederle el tercer grado a la cantante.