El Rey, junto al presidente del Institute of International Finance (IIF), Tim Adams (c), y la presidenta del Banco de Santander, Ana Patricia Botín, al inicio de la inauguración de la reunión de primavera del IIF, en la que expertos económicos de todo el mundo debaten iniciativas para fomentar la estabilidad financiera global y un crecimiento económico sostenible. | Efe

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La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, ha garantizado que el banco mantendrá su presencia en Reino Unido al margen del resultado del referéndum sobre la permanencia del país en la Unión Europea, que se celebrará el próximo 23 de junio. Eso sí, ha reafirmado su defensa de que los británicos sigan en Europa y ha advertido de que el Brexit tendrá «consecuencias reales».

«Es mejor que Reino Unido esté en Europa, porque ambos serán más fuertes. Independientemente de lo que se decida, el Santander va a estar allí (Reino Unido)», ha afirmado Botín durante su intervención en el encuentro de primavera que celebra el Instituto de Finanzas Internacional (IIF).

La presidenta del Santander ha recordado que el banco tiene un tercio de su balance en el país británico. De hecho, Reino Unido aportó la mayor parte del beneficio del banco en el primer trimestre del año, al representar un 23% del total. Así pues, Botín ha admitido que el Santander tiene «mucho en juego» en la economía británica y ha admitido que un «mal» comportamiento del país afectaría «directamente» a la entidad.

Botín ha subrayado que la confianza aún es «débil» en Europa, en un contexto de tipos bajos, aunque ha valorado que ahora la situación económica es «mejor que antes», como denotan los ejemplos de España y Reino Unido. «Si se trabaja juntos, se puede seguir creciendo durante los próximos años», ha defendido.

La presidenta del Santander ha recordado que el sector financiero lleva ocho años evolucionando hacia una posición más fuerte en capital. En este sentido, ha pedido acelerar la aplicación de la regulación para evitar que la banca europea siga siendo penalizada en Bolsa. «Los bancos tenemos más capital, pero el problema es que el capital no es más barato», ha lamentado, para incidir en el efecto para financiar a la economía.