La dirigente popular, María Dolores de Cospedal, entrevistada en el espacio matinal de la televisión pública. | Twitter

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La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha afirmado este lunes que el «rival natural» del PP es «la radicalidad y el extremismo, y eso está representado hoy por Podemos, que necesita obligatoriamente la colaboración del PSOE» para gobernar.

En una entrevista en 'Los Desayunos de TVE' ha argumentado que los españoles tienen que decidir entre esa radicalidad y «un partido que está hablando de sentido común, de moderación» y de defender el actual modelo de convivencia, «donde la unidad de España está fuera de discusión» y también la igualdad de todos los españoles.

Además, ha asegurado que, si vuelve a gobernar el PP y mantiene sus políticas económicas, «no hay por qué hacer ningún tipo de ajuste más» para cumplir con el objetivo de déficit que marca Bruselas, sino «todo lo contrario» porque el crecimiento dará lugar a mayores ingresos «y no habrá que hacer ningún ajuste» con «las políticas adecuadas».

En cambio, ha avisado de que si el nuevo Gobierno empieza a decir que «se puede hacer todo», a «gastar el dinero de los españoles absolutamente en todo» y a «correr» en la dirección de que haya más déficit y más deuda, «a lo mejor otros gobiernos al final sí que tendrían que hacer recortes».

En este punto, ha puesto como ejemplo el caso de Grecia, donde los planes de rescate europeos han impuesto fuertes medidas de ajuste y ha avisado de que «el populismo, la demagogia y la radicalidad pueden quedar muy bien como eslogan electoral, pero a la hora de gobernar no salen las cuentas, ni las económicas ni las sociales».

Campaña en negativo

Por otro lado, ha dicho que le provoca «extrañeza» que el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, vaya a basar su campaña «en decir quién tiene que ser el candidato del PP» y no en exponer sus propuestas para el futuro de España.

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Aludía así al hecho de que Rivera siga insistiendo en que no pactará con Mariano Rajoy. Cospedal ha recordado que Ciudadanos «apostó por tener como candidato» al líder socialista, Pedro Sánchez y ha aprovechado para recalcar que ese partido a veces se define como de centro derecha y otras como de centro izquierda. «Cuando alguien se tiene que estar definiendo constantemente es síntoma de que no sabe dónde está», ha resumido.

Frente a la campaña de Ciudadanos, que considera una campaña «en negativo contra una persona», ha asegurado que el PP prepara una campaña que no será «de perfil bajo» pero que será una campaña «en positivo», aunque eso siempre sea «menos noticia» que «salir a insultar» a otro.

Línea roja

Según ha dicho, el PP hablará de las cosas «que de verdad le importan a los españoles». En línea con el vídeo de campaña lanzado hoy por su partido, ha dicho confiar en que, en esta ocasión, el PSOE levante su «línea roja» y esté dispuesto a hablar con el PP.

A su modo de ver, un demócrata en España sólo puede tener como líneas rojas la defensa de la legalidad, y está convencida de que los intentos de «cordón sanitario» al PP nunca van a fructificar. «Los disparates nunca han valido, del extremismo y la radicalidad nunca ha salido nada bueno», ha insistido.

Eso sí, ha reconocido que no sabe exactamente a qué se refería Pedro Sánchez cuando afirmó que no habrá terceras elecciones, pero ha confiado en que eso se traduzca en que «va a dejar de bloquear la situación» y no se niegue a hablar con el partido más votado.

Cospedal ha defendido que, de no haber sido por «ese veto» de Sánchez, al que ha acusado de haber hablado con todos los partidos salvo el PP, España no estaría preparando unas nuevas elecciones.