El candidato de Vox a la presidencia de la Generalitat, Ignacio Garriga, durante la rueda de prensa que ha ofrecido este lunes. | Efe - Enric Fontcuberta

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El candidato de Vox a la presidencia de la Generalitat, Ignacio Garriga, ha descartado este lunes la posibilidad de que su formación se abstenga para facilitar la investidura del candidato del PSC, Salvador Illa: «No podríamos apoyar a alguien que ha suscrito la agenda del separatismo».

Garriga ha comparecido este lunes en rueda de prensa un día después de las elecciones del 12M, que ganó el PSC con 42 escaños y en las que Vox consolidó los 11 con los que irrumpió en el Parlament hace tres años, aunque ha dejado de ser la cuarta fuerza política y ha sido sobrepasado por el PP, con 15 diputados. Tras el resultado de las elecciones, una de las opciones aritméticamente posible -aunque muy improbable- de formar gobierno, sería el apoyo de los diputados del PP y Vox a Illa, lo que sumaría los 68 escaños que marca la mayoría absoluta.

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Uno de los fundadores de Vox, Alejo Vidal-Quadras, ha instado a PP y Vox, en un mensaje en X, a favorecer un gobierno del candidato socialista en solitario «a cambio de una serie de medidas que acaben con el 'procés». Sin embargo, Garriga ha cerrado la puerta a esa posibilidad: «No podemos apoyar a alguien que ha suscrito la agenda del separatismo. Ha apoyado los indultos, la amnistía, ha modificado el Código Penal, ha impedido que nuestros hijos puedan ser escolarizados en español... Esa es la Cataluña del separatismo».

Para Garriga, el candidato socialista es «uno de los principales responsables» de que Cataluña «no tenga libertad lingüística y sea la región con más inseguridad de toda España». Por último, ha asumido «el gran reto» de «desenmascarar a Illa y al PSC»: «Queremos construir una alternativa. Somos conscientes de que va a requerir muchos años de trabajo, pero no vamos a renunciar a recorrerlos», ha dicho.

Por otro lado, el candidato de la formación de extrema derecha ha querido rechazar los «clichés ideológicos de la vieja política» y ha negado la existencia de «vasos comunicantes» entre su formación y el PP: «Somos partidos políticos diferentes», ha apuntado. Garriga ha defendido que su candidatura no iba dirigida a «un público de derechas, de izquierdas o de centro», sino que es «un proyecto político que va mucho más allá».