Sobre las 10 horas, cuando el tiempo todavía daba un respiro se concentraron unas 25 motos Guzzi de todos los tipos para realizar un desfile por la localidad organizado por Carros de Foc.
La plaza acogía un mercado vintage con ropa, accesorios, productos de bicicleta y cómics que se vio afectados por la lluvia y poco a poco las paradas tuvieron que irse cubriendo con plásticos.
A las 11 horas se hizo la carrera no competitiva para bicicletas anteriores al 1987 que circularon por el centro y luego hubo otras que iban por caminos rurales. Pese a que salieron la lluvia empañó el evento.
También se había recreado en la plaça un photocall ambientado para todos aquellos que se quisieran hacer fotografías retro. Este es el segundo año que se convoca este evento y el objetivo era una vuelta al pasado para dedicar una jornada a las bicicletas clásicas.
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Es per tenir els campaners empardalats.