El comunicador Jeremy Kyle mira a la cámara de este diario durante la grabación del programa. | Teresa Ayuga

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El talk show emitido este jueves noche en horario prime time en el canal británico ITV, que metía el foco en la adicción de los jóvenes ingleses al alcohol y pretendía presentar Magaluf como uno de sus principales ‘abrevaderos’, tuvo una baja audiencia.

El espacio dirigido por el polémico comunicador Jeremy Kyle decepcionó a la mayoría de telespectadores y ese desencanto quedó reflejado en un registro de cuota de pantalla muy inferior al que habitualmente capitaliza un espacio emitido en horario de máxima audiencia.

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El talk show de Kyle logró captar la atención en Reino Unido (principal mercado emisor de turistas a la zonas vacacionales de Calvià) de casi 2,7 millones de ciudadanos, un número que queda muy alejado de los 8,5 que, como es usual, registran los espacios de las mismas características emitidos en el prime time de las principales televisiones británicas.

Los minutos dedicados a los excesos etílicos de Magaluf, concretamente a los acaecidos en la calle Punta Ballena, se centraron en la visita que efectuó Jeremy Kyle a la zona el pasado mes de julio.

Las secuencias dedicadas a Magaluf no lograron captar ningún episodio de borracheras colosales o escenas de chicas en pleno ‘mamading’ . Los minutos de Magaluf se circunscribieron, prácticamente en su totalidad, a la propia figura de Kyle en el transcurso la rueda de prensa ofrecida por el empresario nocturno, organizador de excursiones etílicas, Paul Smith, y en el momento en que fue rociado con espray pimienta por el portero de una discoteca.