Los nuevos gegants son obra del escultor Manel Alba, que los ha confeccionado en su taller de Mancor de la Vall con el máximo secretismo, hasta que este domingo han sido mostrados al público. Los gigantes han sido bautizados con los nombres de los patrones de Consell, Tomeu y Elisabet, y su fisonomía hace honor a dos de los oficios más arraigados a la historia de este joven municipio, así él representa a un trinxeter, pues según el historiador conseller Bernat Campins la fabricación de cuchillos artesanales en Consell se remonta a 1890; y ella, la geganta, representa a los espardenyers, un oficio ya casi perdido que contó con numerosos talleres antaño de los que hoy en día solo queda Can Parets, un taller de alpargatas que acaba de celebrar su primer centenario.
Según explica el concejal Rafel Llobet, «la creación de unos gegants era una idea que rondaba en el Ajuntament desde hacía tiempo, pues queríamos tener unos personajes propios que se pudieran sumar a las distintas fiestas de cultura popular de Mallorca». De hecho, en los últimos años Consell vive un auge en cuanto a iniciativas culturales y de participación ciudadana, con la creación primero de una colla de dimonis con su bestia de fuego, sus caparrots, una batucada y ahora la colla gegantera gracias al empuje de los jóvenes y de las comisiones de Fiestas y de Participación Ciudadana.
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