Unas 600 personas se concentraron en la ermita de Sant Miquel. | Pilar Pellicer

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Unos 600 ciclistas se reunieron el sábado en la esplanda de la ermita de Sant Miquel de Campanet, ubicada justo al lado de la finca de Gabellí Petit donde se encuentran la Fonts Ufanes, para reivindicar que se arregle la vía cicloturística cuyo pavimento se encuentra en muy mal estado.

Según uno de los asistentes, «hace un año que la Conselleria de Turisme prometió una inversión en la zona para tal de mejorar las carreteras y eliminar los baches que provocan un gran número de caídas cada día, pero en lugar de realizar esta mejora se ha invertido el dinero en otros fines».

De hecho, durante la concentración, los asistentes pudieron contemplar una caída de varios ciclistas debido a los continuos baches de la calzada. Los ciclistas aseguran que «la zona de Campanet es un punto estratégico de las vías cicloturísticas por lo que el volumen de ciclistas que transitan por la zona es muy elevado».

Aunque el Ajuntament de Campanet solicitó financiación para poder reformar la carretera secundaria a través del plan de mejoras de las infraestructuras turísticas, el proyecto quedó fuera de la convocatoria y la alcaldesa, Magdalena Solivellas, critico que se hubieran antepuesto proyectos no tan prioritarios. Los usuarios de la vía denuncian «temas políticos porque en Campanet gobierna Més, mientras que en el Govern está el PP».