Los padres colgaron varias pancartas en la fachada del colegio Duran Estrany. | Antoni Pol

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Una vez recibidas las alegaciones del Consejo Escolar y de la Amipa del colegio Duran Estrany de Llubí, la Conselleria de Educació i Universitat ha desestimado la adscripción de los alumnos de este centro al IES de Muro.

Así lo han hecho saber este jueves el conseller Martí March, y el director general de Planificación y Centros, Antoni Morante, en la reunión que han mantenido con la presidenta y el secretario de la Asociación de Madres y Padres del colegio Duran Estrany de Llubí, según informa el Govern en un comunicado.

Los representantes de los padres y madres han entregado al conseller una carta donde se explican los motivos por los que consideran que los alumnos de su colegio tienen que continuar adscritos al IES de Sineu y no al IES Albuhaira de Muro, a raíz de la sugerencia que les había hecho llegar la Conselleria para el próximo curso 2016/2017 de hacer este cambio.

«Aducen la tradición existente de que los alumnos de Llubí vayan a Sineu, los servicios públicos que comparten ambos municipios y la existencia de espacio suficiente en el IES de Sineu, a pesar de las dos aulas prefabricadas que el centro ha solicitado para el próximo curso», tal y como se señala.

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Desde la Conselleria se ha tranquilizado a la Amipa, explicando que el cambio de adscripción «no era una decisión firme» y que se había hecho la propuesta partiendo de la disponibilidad de plazas en el IES de Muro y las necesidades de espacio de Sineu pero que, una vez analizadas las alegaciones del consejo escolar y la carta que este jueves les ha entregado la Amipa, «no se consideraba pertinente hacer un cambio de adscripción» y, por lo tanto, los alumnos del Duran Estrany continuarán en el IES de Sineu.

El próximo jueves se ha convocado una nueva reunión para tratar esta cuestión a la que asistirán representantes del Amipa, del CEIP Duran Estrany y del Ajuntament de Llubí.

Protesta

Por otra parte, la comunidad educativa llubinera, instatisfecha con la propuesta inicial del Govern, había anunciado protestas y movilizaciones si se efectuaba el cambio de adscripción de instituto. Así, antes de la reunión, un centenar de padres y madres se concentraron ante la escuela y colgaron pancartas en la fachada del colegio reclamando explicaciones e información acerca del posible cambio de adscripción.

La protesta contó con la presencia de la alcaldesa de Llubí, Magdalena Perelló, y de regidores tanto de la oposición como del gobierno. Ambos escenificaron su apoyo a la comunidad educativa.