Los estudiantes con miembros del hospital de Inca.

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Veintiocho estudiantes de Medicina de los Estados Unidos completarán una estancia formativa este verano en el hospital de Inca gracias al proyecto Atlantis.

Se trata de un programa de prácticas de observación que tiene como objetivo facilitar y fortalecer vínculos entre los futuros médicos e investigadores de los Estados Unidos y los hospitales donde se desarrolla el programa y sus profesionales, señala en una nota de prensa el IB-Salut.

El director médico del hospital de Inca, Onofre Pons, ha dado la bienvenida a los ocho primeros residentes, que durante un periodo de tres semanas tendrán la oportunidad de conocer el trabajo de los profesionales sanitarios del centro.

A cada uno de los estudiantes se le ha asignado un facultativo de referencia, aunque todos rotarán por los servicios de Anestesiología, de Cirugía General y Digestiva, de Cirugía Ortoprotésica y Traumatología, Dermatología, Digestivo, Farmacia, de Ginecología y Obstetricia, de Medicina Intensiva, de Medicina Interna, Nefrología, Neumología, Neurología, Oftalmología, Psiquiatría, Radiodiagnóstico, Rehabilitación, Reumatología y de Urgencias.

El objetivo es conocer cómo se actúa en el ámbito hospitalario y en qué consiste el trabajo del personal sanitario.

Durante la estancia no podrán hacer actividad sanitaria alguna, ya que solamente participarán como observadores, debido que la legislación norteamericana les prohíbe tratar a los pacientes durante la formación académica.

Como contrapartida, los estudiantes ofrecerán clases de conversación en inglés a los profesionales del hospital e incluso tareas de traducción de artículos.

La Gerencia del Hospital de Inca, la Comisión de Docencia y los jefes de servicio que tutelarán a los estudiantes los han animado a aprovechar este periodo formativo y a conocer cómo funciona un sistema sanitario distitno al de su país.