Los alumnos del Colegio Sueco desfilando desde la Plaça del Coll hasta la de Santa Eulàlia, donde entonaron varias canciones. | Jaume Morey

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El Colegio Sueco ya lleva 31 ediciones celebrando Santa Lucía en Palma, una tradicional fiesta del país escandinavo que representa la llegada de la luz y que en su origen se celebraba la noche del solsticio de invierno (la más larga y oscura del año).

Todos los alumnos del centro, unos 130, salvo los más pequeños, desfilaron este martes desde la Plaça del Coll hasta la de Santa Eulàlia, ataviados con túnicas blancas. Los niños lucían un capirote en la cabeza y una estrella en la mano y ellas una diadema brillante en el pelo, cinta roja en la cintura y una vela en las manos. Durante el recorrido entonaron Sankta Lucia.

El concierto, celebrado en las escaleras de la iglesia, fue seguido por una gran cantidad de ciudadanos entre los que se encontraban muchos de los padres de los alumnos.

La directora del coro es la profesora de música Diana Hernández Camús y las voces estuvieron acompañadas por la pianista de la iglesia sueca Yvone Andersson.