El tenor José Manuel Zapata junto a Lorena Bonnín con su estatuilla.

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Acompañada, sobre el escenario del programa Prodigios, de La 1 de TVE, por la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, la mallorquina Lorena Bonnín consiguió el premio en la categoría de canto del talent musical, durante la final emitida el sábado por la noche. Una actuación en la que interpretó el tema El día que me quieras, de Carlos Gardel, que cautivó una vez más al exigente jurado y un público entregado ante la voz de Lorena Bonnín. La joven recibió la preciada estatuilla y una beca en la universidad Alfonso X el Sabio de Madrid. La pequeña violinista Sofía fue la vencedora final.

«Ha sido una noche muy especial», confiesa Lorena, de 17 años y natural de Palma. «Es una sensación de satisfacción, sobre todo por cómo ha reaccionado la gente, eso me hace muy feliz». Una final en la que Lorena se debatió con la joven soprano Selma, la otra finalista. «Es una cantante virtuosa con mucho talento. Las dos éramos muy diferentes tanto en el escenario como nuestras mismas voces líricas, por ello la decisión del jurado fue difícil, creo que las dos lo hicimos muy bien. Llegar a la final ya es un logro».

En cuanto a los nervios, Lorena confiesa que «siempre hay nervios, y más en la final. Pero después de dos galas ya te sientes más cómoda en el escenario y con la orquesta, y los compañeros daban mucho apoyo, de todos modos la final impone, el nivel es alto y tienes que tener claro que debes estar muy concentrada». Satisfecha y muy contenta con su actuación, Lorena, a quien le brilla la mirada cuando mira la estatuilla en forma de clave de sol, se emociona cuando recuerda la canción que interpretó. El día que me quieras es un tema muy especial para mi madre y toda la familia.

José Manuel Zapata, tenor y miembro del jurado, me agradeció mi actuación, me dijo ‘muchas gracias porque me has tocado el corazón, me has llegado al alma’. Además Zapata sentía la canción y explicó que yo le había contado la historia con mucho sentimiento y verdad».

Zapata, tras la actuación, explicó «tú eres de verdad, eres una artista y no puedes dejar de cantar». Algo que Lorena agradece. «Tantos halagos no podían hacer más que llenarme de emoción y felicidad, cuando canté esa canción traté de sacar mi alma y mi voz hacia al público, siempre he dicho que mi finalidad en el programa era disfrutar y que disfrutaran escuchándome, lograrlo me ha hecho muy feliz».

Una voz muy especial

Su sensibilidad es uno de los secretos de esa voz tan especial que desprende Lorena, que tiene claro que quiere dedicarse profesionalmente a la música. «En mi voz intervienen o influyen muchas cosas, como la constancia y la práctica. Tengo varios proyectos, como seguir con conciertos, concursos y me haría especial ilusión grabar discos».
Además de cantar, tocar el piano y el oboe, a Lorena le gusta componer letras de canciones. «Estoy trabajando en la letra de nuevos temas».

Su éxito durante todo el programa fue en aumento, pese a ello se muestra cauta y modesta. «El éxito es algo que debe buscarse cada día. Por mucho que haya ganado no quiere decir que no siga con mi disciplina y formación, como siempre». El jurado le pidió que no dejara de cantar y le aconsejó que siguiera adelante en el mundo de la canción.

Un ejercicio

Por su parte, la soprano Ruth Iniesta confesó que le había pasado como a Zapata, que desde la primera nota que había cantado Lorena, veía que estaba dentro. «Ruth me dio un consejo que a día de hoy sigo practicando para despertar la voz y colocar las frases delante. Fue un momento gracioso ya que Ruth dio un ejemplo del ejercicio y parecía una alarma de incendios, a continuación yo lo probé y comprobé su efectividad, y hasta ahora he notado que he conseguido llevar la voz más hacia delante, aunque yo sé que esto es solo el principio, porque nunca acabas de aprender en la carrera de música».