La joven senegalesa Ndeye Fatou fue coronada entre lágrimas de emoción y representará a Balears en el certamen nacional. | Pere Bergas

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Una pasarela, dieciséis jóvenes y un solo sueño: coronarse como Miss Grand Baleares. La sala de conciertos Es Gremi acogió anoche la Gala Final de Miss Grand Baleares, un certamen de belleza «que pretende servir como un trampolín fiable para las jóvenes que quieren dedicarse al mundo de la moda y la belleza», expresa Miriam Valdemoros, delegada del certamen junto a Lucía Fernández. Anoche el jurado no lo tuvo fácil, pero finalmente dictaminó que Ndeye Fatou Samb era la joven que merecía la ansiada corona.

«Estoy muy emocionada, no me lo esperaba. Se lo dedico a mi madre, Maggi Sow, por acompañarme siempre», expresó entre lágrimas de emoción Fatou, una joven senegalesa de 23 años que llego a la Isla seis años atrás. Después de ser coronada por Miss Grand Baleares 2022, Marina Vich, Fatou podrá participar la próxima primavera en el certamen Miss Grand Spain 2024, además de ganar diferentes vales para tratamientos de medicina estética, valorados en más de 2.500 euros. Pero la noche de ayer estuvo plagada de sorpresas: el jurado decidió coronar como Miss Grand Mediterráneo a la joven Gema Adrover, quien podrá participar en el certamen nacional.

La joven ganadora abrazó a su madre tras recibir la corona
La joven ganadora abrazó a su madre tras recibir la corona.

Con un público ataviado con sus mejores galas, la gran final arrancó a las 20 horas. Las candidatas, de entre 16 y 25 años, tuvieron la oportunidad de demostrar todo lo adquirido en el último año. Desde el pasado mes de mayo, las jóvenes han asistido a clases de pasarela, oratoria, protocolo, maquillaje o asesoría de imagen, y han participado en talleres de Reiki, meditación o autoestima. «El certamen busca a la mujer completa, y no solo un físico», enfatiza Valdemoros.

Gema Adrover, Miss Mediterráneo
Gema Adrover, Miss Mediterráneo.

A lo largo de la gala, conducida por Celia Sevilla y Miguel Surch, las jóvenes desfilaron en tres ocasiones: primero, vistieron los kimonos de la diseñadora Isabel Gomila; a continuación, lucieron trajes de baño, de la firma Suyai Swim, así como prendas de macramé realizadas a mano, de Juana Love, y por último, cerraron el pase de moda con los vestidos de gala, en su mayoría del diseñador Hugo Micaelo. Asimismo, cada una de ellas realizó un breve discurso en el que trataron temas como el impacto de la guerra en la infancia, el bullying, la importancia de la autoestima o la violencia de género. También hubo espacio para la danza y la música, a cargo de Yvanno, la Fábrica del Arte o Naira Torres y Cristian López.